Aunque en no pocas ocasiones parezca que las carreteras (especialmente autovías y autopistas) se rigen por la ley de la selva, todos los conductores deberían seguir las indicaciones y normas establecidas en el código de circulación. No siempre pasa, es cierto, como también lo es que no hay nada como salir de nuestro país para comprobar que en España se podría decir que conducimos razonablemente bien.
Esto no es óbice para otra afirmación no menos cierta: no es habitual que se transite por el carril adecuado en estas vías. En otras palabras, la norma dice que se debe circular por el carril derecho y solo cambiar al de la izquierda para rebasar a otro vehículo y, una vez finalizado el adelantamiento, lo correcto es volver al carril derecho.
De no hacerlo de esta manera, estamos exponiendo al resto de conductores a un peligro en el peor de los casos, animándoles -aunque tampoco está permitido- a adelantar por la derecha; y en el mejor de los supuestos simplemente se forme una congestión en la carretera. La sanción prevista para esta infracción es de 200 euros.
Sin embargo, hay una razón que está empujando a muchos conductores a huir del carril derecho por un inesperado motivo: el estado de las carreteras.
¿El mal menor?
En varios puntos de las autovías españolas, el carril derecho se encuentra en un estado más que mejorable. El paso de camiones pesados y la falta o retraso en la conservación de las vías ha hecho que se haya convertido en un verdadero campo de minas que ponen a prueba los amortiguadores de los vehículos. Ante esta realidad, los conductores se enfrentan a un problema de difícil solución. O circulan por el carril izquierdo y se exponen a ser sancionados o convierten su travesía en un traqueteo constante que además puede dañar su vehículo.
No son pocos los que optan por la primera de las opciones, sabiendo que las probabilidades de ser cazado y multado no son muy altas. Se trata de un problema que no tiene otra solución que realizar un mejor mantenimiento de las autovías, aunque ello obligue a cortes parciales más frecuentes para frenar el deterioro, ya que los camiones tienen que transitar por el carril derecho de manera obligatoria.