El Sevilla FC llegaba este viernes a Marsella para medirse unas horas después (en concreto, a las ocho de la tarde del sábado en España) al Olympique, de largo el más potente de sus oponentes estivales. Los pupilos de Matías Almeyda, que han ido de menos a más este verano tras perder en su estreno competitivo contra el Birmingham City y empatar sobre la bocina ante el Sunderland (ambos duelos jugados en el Algarve Stadium de Faro) para vencer por 2-4 al Schalke 04 en el Veltins Arena de Gelsenkirchen. Llega, por ende, una prueba de fuego para determinar si el crecimiento en el juego y los resultados tiene continuidad antes de estrenarse en casa el próximo lunes contra el Al-Qadsiah de su ex entrenador Míchel con ocasión del Trofeo Antonio Puerta, la cita más especial por todas las razones imaginables para el conjunto y la afición blanquirrojos.
Persiste el ‘Pelado’, en plena connivencia con Antonio Cordón, en su señalamiento a los descartes. No cuentan ni el recién renovado portero Álvaro Fernández, ni el extremo Adnan Januzaj ni el delantero Rafa Mir. Otros con pocas posibilidades de quedarse, casos del punta Kelechi Iheanacho o el lateral zurdo Adrià Pedrosa, sí se mantienen en la dinámica grupal, de la que se ausentan los lesionados de larga duración Joan Jordán y Tanguy Nianzou, así como otros tres que tienen para menos, como son Isaac Romero, Loïc Badé y Marcao Teixeira. Aunque los Wolves han superado al Nápoles en la puja por Juanlu Sánchez, el de Montequinto se desplazó a la Costa Azul y se mantiene entre los elegidos, sopena que a última hora, si se concretase un acuerdo con los Wanderers, se quedase sin participar para no perjudicar una operación de 17 millones de euros limpios.
Necesitan en el Sevilla FC incuestionablemente dejar salir antes de poder acometer más fichajes, si bien, por razones estratégicas, adquirió antes de que expirara el mes de julio un 40% más de los derechos de Lucien Agoumé para controlar ya el 90% y que el Inter de Milán se lleve únicamente una décima parte de los beneficios que podría dejar en caja el mediocentro francés en los estertores de esta ventana de transferencias. Ese movimiento y las posibles salidas de su compatriota el central llegado del Rennes y de Dodi Lukébakio, por el que el Milan vuelve a estar vivamente interesado, capitalizarán la atención a buen seguro en los últimos días de este mes.