El avance de los incendios forestales ha vuelto a poner contra las cuerdas a los servicios de emergencia en varias comunidades. Las condiciones meteorológicas (calor extremo, viento seco y escasa humedad) han elevado el riesgo a niveles límite. Galicia, Andalucía y Navarra han concentrado este miércoles los frentes más complejos. Mientras los equipos han logrado estabilizar las llamas en Tarifa y controlar el fuego en Obanos, en Galicia aún siguen activos cinco, con núcleos habitados amenazados por el fuego y el despliegue de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en varias zonas.

El patrón se repite: la meteorología condiciona los focos y multiplica las dificultades. En Galicia, el viento ha facilitado el avance de las llamas en dos municipios de Pontevedra, donde la cercanía del fuego a las viviendas ha obligado a activar el nivel 2 de protocolos de emergencia. En Cádiz, las intensas rachas de viento han frustrado parte de los avances conseguidos en las horas previas y, en Navarra, las altas temperaturas han permitido que se mantenga activo un operativo de vigilancia pese a dar por controlado el perímetro.

Galicia, al límite

En este contexto, Galicia se ha convertido en el principal foco de preocupación al seguir cinco incendios activos. Dos de ellos han escalado en gravedad en las últimas horas por la cercanía de las llamas a viviendas y vías de comunicación. El más urgente se ha declarado a primera hora de la tarde en As Neves, en Pontevedra, en la parroquia de San Pedro de Batalláns. El fuego ha ido ganando terreno hasta acercarse a los núcleos de A Abelleira y Portela, lo que ha obligado a la Guardia Civil a ordenar el confinamiento de los vecinos y pedirles que extremen la precaución. “La situación es muy crítica”, ha alertado el alcalde, José Manuel Alfonso. Por otro lado, la humareda provocada por el incendio ha obligado a cortar parte de la A-52, a su paso por Lousadela, y el tráfico solo ocupa carriles interiores.

La Xunta ha activado la Situación 2 de emergencia, aspecto que ha permitido reforzar el operativo con más medios terrestres y aéreos. Al mismo tiempo, los efectivos de la UME se han vuelto a desplegar sobre el territorio para luchar contra el fuego. “Actuamos con la máxima coordinación entre el Ejecutivo central, Xunta y ayuntamientos”, ha asegurado el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada.

A escasos kilómetros de As Neves, a eso de las 16:00 horas de la tarde se declaraba otro incendio en Salceda de Caselas, que ya ha arrasado con 80 hectáreas. El fuego avanza ahora por la parroquia de A Picoña, donde ya trabajan brigadas y medios aéreos.

Ambos frentes han obligado a redoblar esfuerzos en una comunidad que sigue pendiente de otros fuegos no menos exigentes. En A Coruña, continúan activos los incendios de Corme Aldea (Ponteceso) y Xaviña (Camariñas), que el martes forzaron desalojos. En Lugo, los de Monteseiro y Cereixido (A Fonsagrada) suman 140 hectáreas calcinadas.

Pese a esta presión, los equipos han logrado contener otros grandes frentes. Medio Rural ha confirmado que los incendios de Vilardevós (570 hectáreas), Mondariz (20 hectáreas), Brantuas (200) y A Graña (100) ya están controlados. Las labores seguirán este jueves.

Tarifa estabiliza su incendio y Navarra evita un repunte

 

Una de las zonas de camping afectadas por el incendio forestal de Tarifa (Cádiz)A. CARRASCO

Fuera de Galicia, el operativo en Andalucía ha conseguido estabilizar el gran incendio de Tarifa. El martes obligó a evacuar a más de 1.500 personas, pero este miércoles la Junta ha dado luz verde para el retorno a casas, hoteles y cámpines tras desactivar la fase de emergencia a las 18.22. El consejero de Presidencia, Antonio Sanz, ha destacado que “el incendio no está extinguido ni controlado, pero sí en fase de estabilización, y eso permite ya garantizar una seguridad que para nosotros era la prioridad”.

Los trabajos se han centrado en el frente sur, próximo a zonas turísticas, donde el viento ha dificultado el avance de los equipos. Durante la tarde se han producido reactivaciones por el este, que han obligado a mantener activos los medios aéreos.

Una situación similar se ha vivido en Navarra. El incendio que arrasó 338 hectáreas entre Muruzábal, Obanos, Añorbe y Enériz se ha dado por controlado, pero la consejera de Interior, Amparo López, ha pedido no bajar la guardia. “La evolución ha sido bastante favorable, pero seguimos vigilando porque el calor y el viento podrían reavivarlo”, ha explicado. Los trabajos de enfriamiento continuarán durante la jornada del jueves.

El parte meteorológico para este jueves no ofrece alivio. La AEMET mantiene avisos en 39 provincias por temperaturas extremas o tormentas, con especial incidencia en el centro y sur peninsular. Córdoba, Jaén, Ourense, Madrid o Zaragoza figuran entre las 14 provincias en nivel naranja por calor, con previsión de máximas de hasta 41 ºC.

Además del calor, la previsión anticipa tormentas secas y viento fuerte en zonas del sureste y la Bética central, lo que podría generar nuevos focos o reactivar incendios apagados. En el sur peninsular y Canarias, se espera también calima, que podría reducir la visibilidad y entorpecer los vuelos de extinción.

Las mínimas tampoco darán tregua. En amplias zonas del país no bajarán de los 22 ºC, y en puntos del litoral mediterráneo o del suroeste superarán los 25 ºC. Con este escenario, los dispositivos seguirán operando en estado de máxima alerta.