Los vientos erráticos y las tormentas secas dificultan la extinción de los incendios en Castilla y León, especialmente los de Molezuelas de la Carballeda-Castrocalbón, entre Zamora y León, y el de Puercas, en la Sierra de la Culebra zamorana, que suman nuevos desalojos y se superan los 7.500 vecinos evacuados. El fuego de Molezuelas de la Carballeda-Castrocalbón, de nivel 2 de gravedad potencial (IGR), ha seguido avanzando hacia la comarca de la Valduerna, donde se han desalojado esta tarde otras cuatro localidades, lo que eleva la cifra total por encima de la treintena, con más de 7.500 evacuados en la provincia de León. En la provincia de Zamora los vecinos de los seis pueblos que estaban desalojados, alrededor de 400, han podido volver ya a sus casas, y las carreteras se han reabierto, al mejorar las condiciones de un incendio que habría calcinado ya más de 18.000 hectáreas -según expertos- y en el que se combate en dos frentes: en Santibáñez de Vidriales (Zamora) y en Castrocontrigo-Nogarejas (León). Luchando contra los cambios de dirección del viento, y las fuertes rachas, y sin que las tormentas traigan la lluvia deseada, están también en Puercas, el incendio declarado en la Sierra de la Culebra, que mantiene a ocho localidades desalojadas. Los desalojos se han ampliado esta tarde a la localidad de Sesnández, y tienen en prevenido a Ferreras de Arriba y Otero de Bodas, mientras en Abejera y Riofrío de Aliste las llamas entraron ayer en los pueblos, y causaron los primeros heridos de un incendio que ya se ha cobrado también una víctima mortal, en León.