La presencia de trabajadores del Ayuntamiento de Plasencia con un taladro en la escultura de Antonio Morán, en la plaza de Ansano, ha hecho saltar las alarmas este miércoles ante la posibilidad de un traslado inminente.

Sin embargo, el ayuntamiento ha señalado que los operarios han realizado únicamente «trabajos previos» para ver lo que hay bajo la escultura y que, cuando se vaya a trasladar, pueda hacerse «con seguridad».

Con supervisión

Aunque el gobierno local no ha dado una fecha, ha apuntado que, cuando finalmente se mueva hasta la ubicación elegida por el ayuntamiento, próxima al palacio de congresos, estarán presentes un arquitecto municipal y la Policía Local.

El escultor ha mostrado su indignación ante la actuación de este miércoles, que desconocía y que le ha pillado fuera de España. La considera «un acto vandálico por parte del ayuntamiento».

Además, espera que el gobierno local no la traslade «sin un acuerdo previo».

Escultor encadenado

Precisamente, hace un mes, el 22 de mayo, Morán se encadenó a la escultura para protestar por una resolución de alcaldía de fecha 14 de mayo, que determinaba el traslado de la escultura «al entorno circundante al palacio de congresos, ubicado en la calle Luis Vélez de Guevara». Según señaló entonces el ayuntamiento, la plaza de Ansano «no es la más adecuada para la ciudad», de ahí la decisión del cambio de ubicación.

Un trabajador con un taladro, en la escultura de Antonio Morán en Plasencia.

Un trabajador con un taladro, en la escultura de Antonio Morán en Plasencia. / Cedida

Sin embargo, Morán señaló que la decisión se había tomado «unilateralmente, sin consenso conmigo y sin pasar por el pleno, que es donde se decidió en su día instalar la obra en la plaza de Ansano».

Sin acuerdo

De hecho, el escultor apuntó que la propuesta que había trasladado al ayuntamiento era la de mover la obra al eje central de la propia plaza de Ansano, que era la ubicación aprobada «desde el principio y el compromiso manifestado en la rueda de prensa de la inauguración».

Desde entonces, no ha habido ningún acercamiento entre el artista y el ayuntamiento.

Sentencia judicial

Cabe señalar también que el 15 de abril de 2024, el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 condenó al ayuntamiento a «restaurar y devolver a su estado original» la obra y a abonar a los demandantes 15.000 euros de indemnización por los daños sufridos por la escultura en Ansano.

El gobierno local pidió una aclaración de la sentencia sobre la ubicación de la escultura y el juzgado señaló que no era objeto del procedimiento judicial. También preguntó si debía restaurarla el propio artista, a lo que respondió afirmativamente.

Traslado y restauración

Así, hace ya dos meses, el 14 de mayo, el alcaldeFernando Pizarro, decretó el traslado de la escultura para su posterior restauración en base también a «los criterios técnicos expuestos por el arquitecto municipal, en el sentido de que la restauración debe ejecutarse en el lugar donde esté ubicada definitivamente y no de forma previa».

Además, apuntó la necesidad de supervisión de los servicios de Urbanismo y de la colaboración del autor para «evitar cualquier tipo de daño a la escultura en el traslado».

Morán ya ha dejado claro que no va a colaborar porque su visión del traslado es diametralmente opuesta a la municipal y, pese a los plazos dados por el juzgado, la escultura aún no se ha trasladado ni, por lo tanto, restaurado.