El 1 de septiembre a las 23.59 horas quedó cerrado el mercado de verano y con él el periodo de traspasos entre clubes… pero no en toda la geografía mundial. Al Real Valladolid le restaba aún la posibilidad de ejecutar una operación que liberase una importante cantidad de masa salarial, al tratarse de una de las fichas más elevadas de la plantilla: la de Javi Sánchez.

El defensa central estuvo este verano a punto de salir al Hellas Verona italiano hasta en dos ocasiones, pero problemas físicos sin especificar tumbaron la operación. El getafense se mostraba dispuesto a marcharse siempre que no perdiese dinero (puede hacerlo unilateralmente por contrato), y por eso desde el club se intentó cerrar su salida a coste cero al club León de México, aprovechando que el mercado del país norteamericano cierra el sábado 13 de septiembre.

A cinco días de que el fútbol mexicano eche el cerrojo, no hay nada de nada. El León no ha llegado a realizar una oferta como tal, sólo ha mostrado interés por el defensa. Desde el entorno de Javi Sánchez se refuerza la idea de que el jugador se quedará en el Real Valladolid, pues no se contempla la posibilidad de ejecutar su opción de salida de ninguna de las maneras y mucho menos de rescindir el contrato, una vez que no ha llegado ninguna oferta por él. Hay mercados que cierran más tarde, como los de algunos países europeos o los árabes, pero ninguno se ha fijado lo suficiente en el central pucelano.

El zaguero será por lo tanto a partir de ahora un futbolista más para Almada, a efectos de ser convocado, en detrimento del canterano Aranda, del gusto del míster.

Javi Sánchez completa un eje defensivo en el que a priori tiene por delante a Tomeo, Jaouab y Torres, pero el capitán confía en sus posibilidades. En su contra tiene que las lesiones le han impedido jugar más de la mitad de los partidos en las seis temporadas que acumula como blanquivioleta.

El Real Valladolid no ha querido forzar la situación pese al perjuicio económico que supone la continuidad del madrileño. Las relaciones de la entidad con la empresa que representa al futbolista, Leaderbrock, no son del todo fluidas y en Zorrilla tienen la patata caliente de la ampliación de contrato de Chuki con la misma agencia.

La operación está muy complicada y desde Zorrilla no quieren poner más obstáculos a una negociación tan cuesta arriba.