Joxean Fernández Matxin, director del UAE Team, atendió al Mundo MARCA en la segunda jornada de descanso de LaVuelta 2025. El técnico vasco analiza la estrategia para intentar desbancar a Jonas Vingegaard, reconoce que “cambiaría las siete etapas ganadas por la general sin dudarlo” y subraya que el equipo no se conformará con ser segundo: “Si perdemos, será intentando ganar hasta el último día”.

Matxin, con los redactores de MARCA y Radio MARCA en Vigo.

Matxin, con los redactores de MARCA y Radio MARCA en Vigo.IRAIA CALVO

Pregunta. Quedan cinco días de competición, sin contar Madrid, y el reto es recortar 48 segundos. Sobre el papel hay tres etapas importantes de montaña y una contrarreloj. ¿Cuál es el planteamiento del equipo?

Respuesta. Sí, sobre el papel tenemos tres etapas de montaña —martes, miércoles y la Bola del Mundo— además de la contrarreloj. Lo intentaremos cada día. La crono será muy difícil porque Jonas es un corredor que sabe hacerlas de manera increíble en grandes vueltas. Es cierto que en este Tour no la hizo tan bien, con Tadej le metió un minuto, y con Almeida tampoco hubo diferencias abismales (7 segundos a favor del luso). Y en la montaña hay que probar desde mañana, hay que intentar aprovechar la oportunidad de cada día. Si toca no ganar esta Vuelta que sea intentándolo cada día y no arrepintiéndonos de nada.

P. ¿Cómo está el ambiente dentro del equipo después de tantas victorias y de una pelea tan intensa por la general?

R. El ambiente es muy bueno. Tenemos confianza y no tenemos nada que perder. Hemos ganado siete etapas, y si pudiera cambiarlas por la clasificación general lo haría sin dudar. Pero si tenemos que perder intentando ganar, lo haremos así, no acomodándonos por ser segundos.

P. ¿Es consciente el equipo de que para ganar esta Vuelta no bastará con un cara a cara, sino que será necesaria la acción colectiva?

R. Así es. Tenemos que intentarlo de todas las maneras posibles. Habrá etapas en las que el propio recorrido marcará una selección natural, y en otras sí se podrá plantear algo colectivo. Habrá que actuar de formas muy distintas según cada día.

P. ¿Ve usted en Joao Almeida ese espíritu atacante necesario para descolgar a Jonas Vingegaard, o cree que dependerá más de un esfuerzo coral?

R. Es una cuestión de querer hacerlo. Esa convicción ya es el 50% del camino. Luego habrá que encontrar el momento adecuado y tener las mejores piernas, tanto él como el resto del equipo.

P. Después de su lesión en el Tour y de lo que llevamos de Vuelta, ¿Almeida va a más o se le puede hacer larga la carrera?

R. Está bien, eso es evidente porque lo hemos visto en estas dos semanas. Es cierto que no pudo hacer la preparación y la altura ideales para una gran vuelta y eso puede ser un hándicap. Pero no pensamos en lo que no se hizo, sino en el presente y en lo que queda por delante. Vamos a ser combativos desde mañana.

Matxin, con MARCA

Matxin, con MARCAN. LABARGA

P. Entre ganar la general o alcanzar las 100 victorias de equipo en la temporada, ¿qué elige?

R. Ganar la Vuelta y las 100 victorias. Ahora todavía puedo elegir (risas). Lo que quiero subrayar es la importancia de la clasificación general. Las etapas ya las tenemos, hemos jugado a la pequeña donde se podía y cabía la oportunidad de conseguir triunfos a través de la fuga, pero ahora toca ir a por la grande.

P. En Valdezcaray perdieron medio minuto, una jornada que a priori no parecía tan decisiva. ¿Qué lectura hace de aquel día?

R. No soy alguien que mire hacia atrás. Lo que ya ha pasado sirve para analizar, pero no se puede cambiar. Sí que es cierto que ahí Visma lo hizo francamente bien, como estructura y como equipo, y hay que reconocerlo. A veces no es cuestión de lo que uno haga mal, sino de lo que el rival hace bien. No se puede modificar nada. Ahora ya solo toca pensar en lo que viene mañana. Toca buscar soluciones a por qué pasó, pero una vez sucedido, ya no se cambia.

P. Y analizando, ¿qué lectura extrae?

R. Posiblemente que esa ubicación o esa explosividad a la que hubo que recurrir pasó factura cuando estaba a 3 ó 4 segundos y demostró que podía haber estado delante con él. Al final cogió más distancia y ya fue inalcanzable.

P. Marc Soler explicó en La Farrapona que el plan no era pelear por ese triunfo…

R. Ese no era el plan inicial. La idea era evitar que se filtraran corredores de Visma en la fuga, y para eso la mejor manera era entrar con ellos. Por eso siguió a Campenaerts, que en ese terreno era muy importante. En otras etapas sí se cumplió exactamente lo previsto y se ejecutó de manera sublime. Si en La Farrapona Joao hubiese soltado a Vingegaard, no tengáis duda de que hubiéramos parado a Soler. Era un dejavú, en 2011 me tocó parar a David de la Fuente en Geox cuando iba con Taaramae para ayudar a Juanjo Cobo a ganar aquella Vuelta.

P. Me hablaba de Marc Soler. Usted siempre ha confiado mucho en él. ¿Qué significa dentro del equipo?

R. Marc es un fijo tanto en el Tour como en la Vuelta. El año pasado le pedí que estuviera en once fugas y cumplió, incluso ganando en Lagos. Es un corredor importantísimo porque aporta siempre, incluso cuando no gana.

P. Volviendo a la general, cuando se habla de 48 segundos parece poco, pero en realidad, ¿qué dificultad supone desbancar a un corredor como Vingegaard con el recorrido que queda?

R. Hay que dividirlo en tres partes, lo que pase hasta la crono, la propia crono y después de ella. Es muy difícil, porque además de esa distancia está la contrarreloj, donde Jonas puede marcar diferencias, y luego queda la Bola del Mundo. Pero vamos a intentarlo con todo lo que tengamos.

P. La salida de Juan Ayuso agitó el equipo hace unos días. ¿Estar centrados en la pelea por la General ha ayudado a rebajar tensiones internas?

R. A nivel interno está todo igual. En el bus, en el día a día, en el trabajo, no ha cambiado nada. Si hay que vacilarle, se le vacila; si hay que pedirle que trabaje, se le pide… de hecho, Soler le ayudó a ganar en Los Corrales después de esas declaraciones. Nosotros le tratamos con el mismo respeto y compromiso hasta el 31 de diciembre, que es cuando termina su contrato.

P. ¿Y personalmente, cómo queda su relación con Ayuso? ¿Se ha sentido decepcionao?

R. Nuestra amistad sigue. Ayer estuvimos hablando en la habitación como siempre. Mi relación con él no ha cambiado. Obviamente no comparto sus opiniones, pero no tiene nada que ver una cosa con la otra. Nuestros caminos se separan el 31 de diciembre, le deseo lo mejor y que no nos gane a nosotros ninguna carrera.

P. Tras lo sucedido con las protestas, como la caída de Javi Romo o lo ocurrido en Bilbao, ¿qué mensaje enviaría a los aficionados que vayan a las próximas etapas?

R. No tengo toda la información de lo sucedido. Lo que sí pido es respeto, que se permita que la competición se desarrolle de forma deportiva. Lo vimos en el Angliru, con una llegada brutal, a 12 por hora, y hubo un respeto máximo. Eso es lo que tenemos que pedir a todas las partes: respeto al ciclista.

P. ¿Cómo están viviendo lo del Israel?

R. No hay comunicaciones internas. Los corredores tienen su propio grupo de Telegram, algunos han manifestado algunas cosas y otros no. Nosotros tenemos casi la misma información que vosotros.

P. Y sobre la etapa de Madrid, ¿os ha llegado alguna información de una posible cancelación?

R. Nada, lo mismo que a vosotros. Leímos lo que salió que quizá se pudiese cancelar y luego que se iba a correr.

P. ¿Va a ser La Vuelta la última carrera de Ayuso con el maillot de UAE?

R. Lo hablamos hace tiempo. Su calendario incluía el Tour de Guangxi y le dije que si ganaba una etapa, la crono por equipos o la General, se libraría. Ya ha cumplido con dos de de las tres así que no irá.

P. El cambio de calendario de Ayuso, ¿cómo se gestionó?

R. Lo hablamos en la segunda semana del Tour, el segundo día de descanso. Juan es un ganador y queríamos que hiciese otro calendario alternativo al de Tadej. El equipo quiere ganar en todos los frentes. Cuando decidimos conjuntamente que Pogacar no viniese, hablamos con Juan para quitar Plouay, Polonia y Canadá de su calendario porque finalmente venía a LaVuelta tras hacer San Sebastián. Él pidió no hacer la altura y hacer la preparación en Jávea. Tenía que hacer un periodo de concentración en altura que quizá le faltó. Nos pidió hacerlo en Jávea y nosotros se lo concedimos. El equipo cedió, para que veáis que no hay tanta dictadura (risas).