Los Sacramento Kings continúan explorando opciones para reforzar su rotación en la posición de base, incluso después de haber fichado a Dennis Schröder con un contrato significativo este verano. Uno de los nombres que más fuerza ha ganado en los últimos días es el del veterano Russell Westbrook, ex MVP de la NBA y una figura polarizante que podría llegar a la capital californiana para aportar liderazgo, experiencia y energía.

El interés no es solo especulación. El periodista Carmichael Dave avivó la conversación este fin de semana a través de su cuenta en X donde aseguró que hay «fuerte interés de ambas partes».

Un currículum imponente, con algo aún en el tanque

A sus 36 años, Westbrook está lejos de su mejor nivel físico, pero viene de una temporada decente con los Denver Nuggets, donde empezó como titular en 36 partidos. Si bien el equipo funcionó mejor con él fuera de la cancha en cuanto a números, su impacto individual fue notable: intensidad constante, gran lectura en el juego sin balón y una sorprendente química con Nikola Jokic en el juego de dos hombres. Nadie puede negar además que Westbrook es uno de los mejores bases de los últimos tiempos y su experiencia junto a su calidad hacen del base una gran oportunidad de mercado para aquellos equipos que busquen fortalecer su rotación. Westbrook sigue siendo un pasador de élite y un excelente reboteador para su posición.

Sacramento busca sacudirse la mediocridad

La temporada pasada, los Kings parecían estancados, incapaces de consolidarse como un verdadero contendiente en el Oeste y quedando fuera en el Play-In. En ese contexto, Westbrook representaría más que una incorporación estadística: aportaría energía, presencia física y una mentalidad competitiva que muchos creen que el equipo necesita urgentemente.

Además, su combinación de fuerza y experiencia lo haría compatible con otras piezas como Malik Monk, Schroder o el novato Devin Carter. Westbrook podría ocupar minutos importantes sin afectar demasiado la estructura del equipo, siempre que se gestione bien su rol.

No todo es color de rosa. Westbrook sigue siendo un jugador que genera división: su estilo de juego agresivo y acelerado puede provocar pérdidas costosas, y su toma de decisiones ha sido cuestionada a lo largo de su carrera. Además, su llegada significaría restar minutos de desarrollo a jóvenes como Keon Ellis, Devin Carter o Nique Clifford, algo que podría condicionar el crecimiento a largo plazo del proyecto Kings.

También es importante mencionar que Westbrook cumplirá 37 años en noviembre, lo que suma otro elemento de veteranía a una plantilla que ya se inclina hacia la experiencia.

¿Encajará con Sabonis?

Una de las razones para considerar seriamente esta apuesta es la posibilidad de que Westbrook forme una sociedad funcional con Domantas Sabonis. Aunque el lituano no es Jokic, sí comparte algunas cualidades como pasador desde el poste alto. En Denver, Westbrook mostró una química sorprendente con Jokic, especialmente en cortes y jugadas sin balón, algo que Sacramento necesita urgentemente mejorar. Cabe recordar que los dos jugadores coincidieron en su etapa en los Thunder.

Westbrook y Sabonis en un amistoso ante el Barça

Westbrook y Sabonis en un amistoso ante el Barça / JAVI FERRANDIZ

Una apuesta sin demasiado riesgo

Pase lo que pase, firmar a Westbrook no va a cambiar drásticamente el rumbo inmediato de unos Kings que aún lucen lejos de la élite del Oeste. Sin embargo, la incorporación del base podría ser un experimento interesante, una fuente de motivación interna y una forma de añadir carácter a un equipo que necesita encontrar una identidad más firme.

En el peor de los casos, su incorporación serviría como puente mientras se desarrollan las promesas jóvenes del equipo. En caso de funcionar, podría ser una chispa que revitalice a una franquicia que busca volver a su mejor nivel y que puede encontrar en Westbrook una opción más que rentable.