Los números no salían. El Gobierno lo sabía y llevaba varios días articulando el relato para amortiguar la derrota. Una derrota especialmente dolorosa por tratarse de la primera votación del recién inaugurado curso parlamentario, pero, además, por neutralizar la medida estrella de la vicepresidenta … segunda del Gobierno. Yolanda Díaz ha seguido su propio carril en las negociaciones de la reducción de la jornada laboral, sin atender a las advertencias del PSOE, que recelaba de sus urgencias y que no ha querido involucrarse en las conversaciones para no compartir el golpe.

Y no hay mayor distancia que la que marcó el presidente del Gobierno. Ya no política, sino física. Pedro Sánchez salió del Congreso de los Diputados tras someterse a la sesión de control a primera hora de la mañana y no asistió a la maratoniana jornada parlamentaria que acabó con votaciones al filo de las 10 de la noche.

Registro del Congreso donde se puede ver que Sánchez no votó

Registro del Congreso donde se puede ver que Sánchez no votó

CONGRESO

El jefe del Ejecutivo no respaldó a su vicepresidenta segunda durante el debate de la iniciativa, pero es que ni siquiera votó para tratar de salvar el veto que PP, Vox y Junts habían planteado en forma de enmienda a la totalidad de devolución. Durante el intercambio dialéctico, Díaz rompió el tabú de atacar a la formación de Carles Puigdemont y lanzó duros reproches a su portavoz, Miriam Nogueras, a quien acusó de representar al «gran capital».

En lugar de quedarse en el Congreso de los Diputados, Sánchez acudió al estreno de la última película de Alejandro Amenábar sobre Cervantes, titulada ‘El Cautivo’. El jefe del Ejecutivo lo hizo acompañado del ministro del Interior y de su mujer, Begoña Gómez, que esa mañana había tenido que declarar por cuarta vez ante el juez Juan Carlos Peinado para explicar las gestiones de su asesora en la cátedra que dirigía.

La ausencia de Sánchez fue criticada por el PP, que apuntó a la contradicción que supone que el debate sobre la reducción de la jornada laboral se produzca en un pleno de «cerca de 13 horas», con votaciones que se prolongaron hasta las 10 de la noche para «no tener que trabajar en la Diada por exigencias del independentismo».