En el ciclismo de grandes vueltas, los días buenos y malos se suceden como etapas inevitables de una misma batalla. Félix Gall, corredor austriaco del Decathlon AG2R La Mondiale Team, lo sabe bien. Con apenas 27 años, ya ha firmado victorias de prestigio en el Tour de Francia y el Tour de Suiza, y ahora, en la Vuelta a España 2025, afronta con entereza los golpes de uno de los recorridos más exigentes de la temporada. El líder de la escuadra gala conversa con MARCA sobre sus aspiraciones en La Vuelta.
Felix Gall: Consistencia y fiabilidad austriaca
“Es una semana triste, una semana dura”, confesó a MARCA después de la etapa de El Morredero. “El Tour me costó mucha energía, me faltaron unos vatios hoy… pero conseguí no perder demasiado tiempo. En unagran vuelta nunca puedes rendirte, es normal tener días malos. Lo importante es gestionarlos y seguir luchando hasta la meta”.
Con sus 66 kilos de peso y 1,80 metros de estatura, Gall es un escalador probado, con un perfil marcado por la regularidad en las montañas y la capacidad de encadenar esfuerzos. Esta Vuelta, sin embargo, le está exigiendo más de lo previsto. Sus puestos en las últimas etapas –un quinto en La Farrapona tras haber resistido en L’Angliru– muestran que las piernas todavía responden, aunque las jornadas de alta montaña han sido una prueba de fuego.
Felix Gall, en La Vuelta.Decathlon AG2R La Mondiale.
“Fueron etapas duras, especialmente después del Angliru. Pero todavía queda una gran pelea más. Al final, solo se trata de llegar lo más rápido a la línea de meta”, señala. Esa pelea apunta al terreno donde los escaladores suelen buscar redención: las últimas cimas antes de Madrid.
Gall no oculta que la crono no le favorece particularmente, y sabe que deberá reducir daños en Valladolid: “La crono no es mi especialidad”, admite. “Pellizzari tiene un minuto y estuvo muy fuerte hoy. Creo que Riccittello y Traeen tampoco son grandes especialistas en la crono, así que debería estar ajustado. La crono será rápida, técnica, una crono clásica”.
El austriaco asume con pragmatismo el desafío: sabe que una pérdida controlada en la lucha contra el crono puede abrirle margen para atacar en la montaña. Lo ha demostrado antes: en 2023, en el Tour de Francia, fue capaz de ganar una etapa en las cumbres alpinas y terminar octavo en la general, confirmando su estatus de corredor de grandes vueltas.
Todo dependerá de las diferencias después de la contrarreloj en Valladolid
El nombre de Giulio Pellizarri apareció inevitable en la conversación. El italiano sorprendió con su valentía en El Morredero y se llevó la etapa, un ejemplo de que incluso en la tercera semana todavía se pueden mover las jerarquías. “Pellizarri demostró que es posible. Me sorprendió ver a Pidcock ahí. Todo dependerá de las diferencias después de la crono y de lo que ocurra el sábado. Todos quieren intentarlo”, apunta Gall.
Del triatlón al World Tour
La historia de Felix está marcada por una cierta rareza en el ciclismo austriaco: “En Austria no es una gran tradición, aunque en los últimos años hemos tenido buenos corredores. Yo probé varios deportes: el triatlón fue mi primera disciplina de resistencia, también probé en esquí, tenis… A los 16 años cambié a ciclismo por diversión, pero rápidamente se tornó en algo serio”.
Felix Gall, en La Vuelta.Decathlon AG2R La Mondiale.
Ese instinto lo llevó directamente al programa de desarrollo del Team Sunweb, uno de los viveros más sólidos del ciclismo moderno: “Fui directo al programa de desarrollo, en ese momento era de los mejores programas. Quizá ahora se ha estandarizado más, pero en aquel entonces era especial”.
La temporada actual de Gall ha sido de todo menos discreta. En el Tour de Francia firmó un top 5 en la clasificación general, un logro que confirma su madurez. Antes, en el Tour de Suiza, terminó cuarto de la general y rozó otra victoria de etapa. También en el Tour de los Alpes volvió a mostrar consistencia con un quinto puesto en la general.
En la Vuelta, ha empezado a sentir el peso de la temporada. Brilló en Valdezcaray (4º en la etapa 9) y resistió con los mejores en La Farrapona y el Angliru (dos veces 5º). Sin embargo, también tuvo días difíciles, como en Monforte de Lemos o en Mos, donde cedió tiempo valioso. Gall lo explica con naturalidad: “Me faltaron fuerzas algunos días, pero lo importante es no hundirse. En una gran vuelta, más que en ninguna otra carrera, nunca puedes abandonar la lucha”.
Ganador de etapa en el Tour de Francia, ganador en Suiza, escalador fiable y corredor regular en las grandes vueltas. A sus 27 años, tiene claro su siguiente gran objetivo: confirmar podios en las generales y seguir buscando victorias que lo coloquen entre los nombres de referencia del ciclismo.