El anuncio comienza con mármol, sombras suaves y vitrinas doradas. Las salas del Louvre, sumergidas entre el glamour y la majestuosidad, se convierten en escenario … mientras los modelos se deslizan por los espacios del museo más visitado del mundo. Y, de pronto, suena ‘Maite, nauzu zeharkatu’, canción de la tolosarra Verde Prato, que acompaña la presentación de la colaboración entre la pinacoteca francesa y la firma Inoui Editions.
El euskera entra así por la puerta grande, a través de uno de los mayores escaparates culturales del planeta. Su presencia, como banda sonora del arte europeo, no es solo una elección estética, sino una declaración, la de dos casas creativas que apuestan por la singularidad como forma de universalidad.
Fruto de una inmersión visual en las entrañas del Louvre, nacen tres piezas textiles exclusivas, concebidas como pinturas entre el grabado y las bellas artes. La colección ya está disponible en los establecimientos oficiales, tanto físicos como tiendas online, tanto del museo como de la casa Inoui Editions.
Natural de Tolosa, Ana Arsuaga —que así se llama— es una de las voces más singulares de la música vasca actual. Como Verde Prato, ha construido un universo propio donde el canto tradicional euskaldun se entrelaza con la electrónica minimalista, los paisajes sonoros con la memoria oral, y la voz con el cuerpo. La canción forma parte del EP ‘Erromantizismoa’. Explora el amor desde la fisura, el trance, y la lengua como materia viva. Un estilo que, como esta campaña, habita entre lo íntimo y lo monumental.