Jaime García

Viernes, 12 de septiembre 2025, 10:36

Con el reloj marcando las 6:30 horas de la mañana, el BM Salamanca se embarcará este domingo en una nueva temporada poniendo rumbo a Torrelavega para medirse con su filial en el primer partido (12:30 horas) de la Primera Nacional. Una nueva campaña que se afronta con una renovación partiendo desde el banquillo, después de que Martín Rechimón tomará las riendas del primer equipo salmantino antes del parón veraniego.

«Empieza una temporada larga. Tenemos ganas y estamos preparados», inicia el entrenador, Martín Rechimón. Una vez superada la pretemporada, el técnico argentino realiza un balance «positivo» respecto a las sensaciones sobre el parqué. «Llevamos con esta cinco semanas de trabajo. En cuanto a carga bien, en cuanto a entrenamientos bien, en cuanto a gente un poco cortos, también estamos con alguna lesión en la plantilla, más las bajas que hubo de la temporada pasada, pero bueno emplearemos jugadores de la cantera para solventar esa falta de recurso», explica.

El curso anterior finalizó para los salmantinos cumpliendo el objetivo, pero sin dejar un buen sabor de boca. Ahora, Rechimón se marca el objetivo de lo que fue el BM Salamanca los sábados por la tarde en la capital del Tormes. «Los chicos con su entrega son los que hacen que la afición se vea contagiada del esfuerzo, del sacrificio, de las ganas que le ponen. Lo que noté en este mes y poco que estoy trabajando es que los chicos se esfuerzan mucho, que trabajan de una manera pasional. Se entregan mucho por el deporte», comenta.

Sobre lo que le hizo adentrarse en la aventura del BM Salamanca, el técnico remarca un nombre: Sebas Elena. «Él (Sebas) tiene toda la culpa de que yo esté aquí. Contactó conmigo, pidió referencias en Aranda de Duero y es una figura importante dentro del vestuario», ampliando sobre la veteranía del estandarte salmantino: «A pesar de la diferencia de edad que tiene, siempre está motivado, siempre con ganas, siempre es el primero. Y, la verdad que tener una persona así en el vestuario también es importante», asegura.

En referencia a la próxima cita, que enfrenta a los charros con el filial del Torrelavega, el entrenador argentino espera un rival de alto calibre: «Es un equipo que sabe a lo que juega, en un lugar donde el balonmano tiene mucho peso. Seguramente nos encontremos con jugadores que el sábado hayan estado jugando en Asobal y el domingo que vamos nosotros también sumen sus minutos porque tira mucho del segundo equipo para darle rodaje a jugadores jóvenes».

Por último, habrá un elemento fundamental si el BM Salamanca quiere soñar a lo grande: el pabellón Río Tormes. «El pabellón tiene que ser nuestra principal arma. Es un grupo con desplazamientos largos, y tenemos que ser un pabellón en el que los equipos no quieran venir a competir», concluyendo con la siguiente premisa: «La afición necesitamos que nos acompañe y que sea un jugador más dentro de la pista».

Comenta

Reporta un error