Una diseñadora de interiores logra que este casa de madera de nueva construcción tenga todo el encanto de un hogar centenario
En este chalet con revestido de madera de 650 m2 situado en una zona rural de Inglaterra, la interiorista Nicola Harding ha conseguido algo extraordinario: crear un hogar con alma centenaria en un edificio de nueva construcción.
El encargo surgió de una colaboración anterior con los propietarios durante la pandemia, cuando la pareja pasó una larga temporada en el hotel Beaverbrook Town House de Londres, diseñado por Harding. Les gustó tanto su enfoque que la contrataron para la renovación de una granja. El resultado fue tan satisfactorio que le pidieron que se encargara también de este ambicioso proyecto. «Se trataba de un edificio nuevo, creado completamente desde cero, pero [los propietarios] no querían que pareciera impecable», recuerda Harding. «[Uno de ellos] quería que tuviera alma desde el principio y, como creativo que es, un lugar que encendiera y alimentara la creatividad para él y su pareja».
En el salón de la casa hay obras del pintor Jason Thompson. Un sillón vintage de piel de oveja de los años 50 completa la robusta configuración de asientos, junto con una otomana de gran tamaño cubierta de patchwork añil vintage.© Dean Hearne
Mimo artesano y pátina natural
Para lograrlo, Harding introdujo historia a través de materiales hechos a mano, con profundidad y pátina natural. Las baldosas de zellige hechas a mano, típicas de la artesanía marroquí y con sus irregularidades e imperfecciones, aparecen por toda la casa. La estructura de madera permanece expuesta, sin selllar, para que el paso del tiempo deje su marca.
Harding también influyó en la arquitectura, empujando las paredes para crear proporciones más generosas, alinear las vistas y establecer puntos focales. Estos movimientos dieron a los interiores una sensación de inevitabilidad, como si hubieran evolucionado lentamente en lugar de surgir de golpe.
La cocina, totalmente hecha a medida, cuenta con lámparas vintage y taburetes Standen de Jamb. El techose pintó con el tono Sulking Room Pink de Farrow & Ball, mientras que las paredes muestran el Chalky Coral en Fresco Finish de Pure & Original.
© Dean Hearne
La despensa cuenta con un mueble a medida de Harding pintado en Old Rose de Pure & Original. Los dibujos son de Henrietta Molinaro.
© Dean Hearne
Una mesa Tuck In de NiX by Nicola Harding combina perfectamente con media docena de sillas con pedestal de los años 30, procedentes de un crucero, y un par de sillas Bobbin Leg, de Howe London. La alfombra marroquí de los años setenta es vintage.
© Dean HearneLa creatividad, la razón de ser del hogar
La cocina personifica su estrategia. Un volumen de doble altura, inundado de luz natural procedente de puertas francesas y tragaluces recién añadidos, prepara el escenario. Las baldosas de zellige burdeos brillan cuando el sol cambia a lo largo del día. Una estufa de leña esquinera anima a quedarse, mientras que una cómoda a medida en un alegre resalta el espíritu de los muebles familiares heredados en un espacio de nueva construcción. «Me encanta que las cosas no combinen entre sí ni sean perfectas: da la sensación de que la casa ha evolucionado con el tiempo», dice Harding.
La casa está diseñada para la expresión creativa. Hay un estudio de grabación, una sala de arte en el piso de arriba y una zona para el estudio y la escritura. Una colección de vinilos en el salón principal invita a disfrutar de interludios musicales.