Las 20 películas que ponemos a cabalgar en la planicie de nuestras propuestas han sido escogidas como se escoge el polvo del oro, tamizando entre mitos y revólveres para asegurar el éxito a la hora de acertar. Cada cinta se erige como un capítulo imprescindible de un género a caballo entre la violencia, el amor y la soledad.

1. Centauros del desierto: el rostro de la venganza

En Centauros del desierto (The Searchers, 1956), John Ford despliega un mapa de polvo y cicatrices. John Eayne es Ethan Edwards, que tiene los ojos quemados de tanto mirar horizontes, vaga con una furia que no conoce ni el descanso ni el perdón. Esta es la Odisea de un hombre encadenado a su odio, pero también un western que desafía su propia leyenda. ¿Quién busca a quién? El desierto no responde, solo escucha. Es la película donde las elipsis lo cuentan todo y el héroe deja de ser un monumento para convertirse en hombre: roto, ambiguo y solitario como un lobo que ni siquiera el paisaje puede domesticar. Disponible en Prime Video y Filmin.

2. El hombre que mató a Liberty Valance: la muerte del mito

En el crepúsculo del western, Ford retoma la batuta con El hombre que mató a Liberty Valance (The Man Who Shot Liberty Valance, 1962). Aquí, la leyenda es sólo un eco que retumba en los periódicos. James Stewart y de nuevo John Wayne personifican el ocaso de un tiempo donde las balas escribían la historia. ¿Qué importa si fue Tom Doniphon o Ransom Stoddard quien disparó? Lo esencial es que la civilización necesita mentiras bellas para sobrevivir. En este filme, el género se mira al espejo y ve que ya tiene arrugas, pero no deja de apretar los puños. Vera Miles y Lee Marvin redondean una de las mejores películas de la historia. Disponible en Movistar Plus+, en Apple TV+ y en Prime Video.

3. Los siete magníficos: el alma del heroísmo

Cuando Yul Brynner y sus compañeros montan al galope en Los siete magníficos (The Magnificent Seven, 1960), traen consigo una sinfonía de heroísmo que se oye entre disparos y trompetas. Basada en Los siete samuráis de Kurosawa, esta película es un empeño personal del calvo más famoso de Hollywood, con permiso de Koyak, y un homenaje al sacrificio. Pero también es una elegía al sentido del deber. Cada pistola tiene su destino, cada héroe su sacrificio. Y cuando mueren, no es el hombre quien cae, sino el mito que el viento se lleva. Y es muy divertida. Disponible en Movistar Plus+, en Apple TV+ y en Prime Video.

4. Las furias: Shakespeare a caballo

Anthony Mann (fue marido de Sara Montiel) entregó en Las Furias (The Furies, 1950) un western que respira tragedia griega. En el rancho de los Jeffords, las tensiones familiares estallan con una intensidad que podría haber firmado Sófocles. La descomunal Barbara Stanwyck y Walter Huston pelean no por la tierra, sino por el poder que envenena la sangre. Si los westerns suelen ser odas a la masculinidad, aquí se invierte el destino: una mujer se levanta como titán, y el paisaje no puede sino inclinarse ante su sombra. Pedazo de película.

5. La diligencia: el origen del mito

Con La diligencia (Stagecoach, 1939), John Ford no inventó el western, pero sí lo hizo muy grande: le dio las alas que le faltaban. Aquí se reúnen todos los arquetipos, incluido John Wayne: el pistolero errante, la dama en apuros, el paisaje implacable. Es una película que cruza un desfiladero no sólo físico, sino espiritual: el cine como viaje donde los personajes, al igual que el público, descubren que la civilización es una delgada línea que el desierto puede borrar. Imprescindible. Disponible en Filmin.

6. Bailando con lobos: la redención de la frontera

Cuando Kevin Costner estrenó Bailando con lobos (Dances with Wolves, 1990), el género estaba dormido en un saloon polvoriento. Pero esta épica le devolvió el aliento. El teniente Dunbar se enfrenta al oeste sin pistolas pero con el alma desnuda, buscando redimirse entre los lakota. El western se convierte aquí en una carta de amor a los paisajes y a la humanidad perdida, una obra que canta al mismo tiempo la belleza de lo extraño y la tristeza de lo inevitable. El indio Graham Green ha muerto hace días. Verle de nuevo es un merecido homenaje. Y esa música… Disponible en Prime Video y Movistar Plus+.

7. Dos hombres y un destino: la poesía del ocaso

Dos hombres y un destino (Butch Cassidy and the Sundance Kid, 1969) es una elegía con carcajadas. Paul Newman y Robert Redford cabalgan no hacia la gloria, sino hacia el crepúsculo. George Roy Hill convierte la historia de estos forajidos en un western teñido de modernidad. Aquí no hay héroes, sólo hombres que saben que el fin es un acorde que resuena cada vez más cerca. Pero, ¿y qué importa? La amistad, como el ocaso, siempre será eterna mientras dure. Y Katharine Ross, la novia de Dustin Hofmann en El Graduado, monta en bicicleta con Paul Newman con la famosa canción de fondo. Disponible en Movistar Plus+, Disney+ y Prime Video.

8. Johnny Guitar: las balas del melodrama

Johnny Guitar (1954), dirigida por Nicholas Ray, es un western que se despega del suelo para volar en alas de un melodrama operístico. Joan Crawford es Vienna, una mujer que desafía no sólo al pueblo, sino al género entero. Las pistolas cantan, pero aquí la música verdadera está en las miradas, en el duelo entre dos mujeres que no necesitan caballos para conquistar el horizonte. Una película que brilla como un diamante, afilada y femenina. Puro cine. Disponible en Movistar Plus+, Prime Video y Filmin.

9. Duelo de titanes: los tambores de la ley

En Duelo de titanes (Gunfight at the O.K. Corral, 1957), Burt Lancaster y Kirk Douglas se convierten en Wyatt Earp y Doc Holliday, respectivamente. El duelo final es un enfrentamiento entre pistolas y entre dos visiones del mundo: la ley como ideal y la violencia como realidad. Es un western de ritmo solemne, como si cada disparo resonara en el eco de la eternidad. Aquí no sólo se juega la vida, sino el sentido del deber. Disponible en Disney+, Apple TV+ y Prime Video.

10. Django desencadenado: la venganza estilizada

Quentin Tarantino lleva el western a una pista de baile sangrienta en Django desencadenado (Django Unchained, 2012). Aquí no hay espacio para las sutilezas: cada bala tiene el nombre de un opresor. Jamie Foxx es el héroe vengador, pero también un eco de un género que se reinventa en la extravagancia. La cámara gira, el sol arde, y la sangre pinta el desierto como si fuera un lienzo maldito. Disponible en Netflix, Apple TV+, Prime Video y Rakuten TV.

11. Valor de ley: los senderos de la justicia

Cuando los hermanos Coen reinventaron Valor de ley (True Grit, 2010), tomaron una historia clásica (John Wayne se llevó el Oscar por la suya pero ésta es muy superior) y la tiñeron de sombras. Jeff Bridges como Rooster Cogburn es un hombre que simboliza la justicia cansada, sucia y borracha, que a pesar de todo sigue avanzando. Mattie Ross, la joven protagonista, es quien lleva la antorcha, recordándonos que la justicia nunca llega sola: necesita manos jóvenes que la sostengan. Descomunal. Disponible en Apple TV+, Rakuten TV y Prime Video.

12. Silverado: la sinfonía del oeste

Lawrence Kasdan compuso en Silverado (1985) una sinfonía coral donde cada personaje tiene su propio tema. Este es un western que no teme celebrar los tropos del género, pero lo hace con una elegancia que los rejuvenece. Aquí los héroes aún cabalgan, las balas aún zumban, y el desierto sigue siendo un teatro donde la vida y la muerte se enfrentan cada amanecer. Kevin Costner es un crío. Disponible en Apple TV+ y en Prime Video.

13. La conquista del oeste: la épica infinita

La conquista del oeste (How the West Was Won, 1962) es un fresco monumental que abarca generaciones. A través de sus episodios, el género se despliega como una epopeya nacional. Los personajes son piezas de un rompecabezas que, al completarse, revela la el coste humano y moral de dicha conquista. Es un western que, más que contar una historia, construye un mito y persigue con pasión la vida de una familia de colonos desde sus raíces hasta que mueren y dejan a sus descendientes para seguir luchando por vivir. El reparto es tan inconcebible como su banda sonora. Disponible en Prime Video.

14. Solo ante el peligro: el reloj del destino

Gary Cooper mira el reloj y sabe que el tiempo es un enemigo implacable en Solo ante el peligro (High Noon, 1952). Fred Zinnemann construye un western que es más bien una tragedia moderna, donde el héroe no necesita cabalgar: su batalla es contra la soledad y la traición. Aquí, el oeste no es un paisaje, sino un estado del alma. Y cuando los disparos retumban, no sólo se juega la vida del protagonista, sino también la dignidad humana. Grace Kelly se enamoró del gran actor. Tenía 23 años y ya era una diosa. Dimitri Tiomkin pone la música inolvidable. Disponible en Movistar Plus+ y Prime Video.

15. Sin perdón: la lápida del género

En Sin perdón (Unforgiven, 1992), Clint Eastwood pone el último clavo en el ataúd del western clásico. William Munny es un hombre roto que busca redención en un mundo donde ya no hay espacio para los héroes. El género, cansado de cabalgar, se detiene aquí para mirar atrás con melancolía y brutalidad. Si el western es un canto a la épica, esta película es su réquiem. Pero como todo réquiem, no es un final, sino un nuevo comienzo. Gene Hackman pone cara de malo en este western que podría ser el mejor de la historia del cine. Disponible en Apple TV+.

Bonus track

  • Veracruz. Disponible en Prime Video, Filmin y Apple TV.

  • Misión de audaces. Disponible en Amazon Prime, Filmin y Apple TV.

  • Mayor Dundee. Disponible en Prime Video y Filmin.

  • Llegaron a Cordura. Disponible en Prime Video, Filmin y Apple TV.

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