Bajo un calor sofocante, con muchos daneses en la pista Manolo Santana, España está contra las cuerdas en su eliminatoria de segunda ronda de los … Qualifiers ante Dinamarca, en la antesala de la Final a 8. El cero a dos, después de las victorias de las derrotas de Pablo Carreño (123º) ante Holger Rune (11º) y de Jaume Munar (37º) contra Elmer Moller (112º) apelan sólo a un milagro deportivo para pensar en la remontada, que pasan por ganar las tres citas de este domingo, en una de ellas con Rune en un partido de individuales.
Frente a los nubarrones por la derrota en dos mangas de Pablo Carreño (5-7 y 3-6, en 1 hora y 39 minutos), Jaume Munar salía a la pista para tratar de devolver la normalidad la serie. Derritió al poco ortodoxo Elmer Moller (113º), con un apabullante 6-2 en el primer set, después de un comienzo con mucha más decisión del danés.
Jaume Munar (37º) pierde ante Elmer Moller, por 6-2, 1-6 y 4-6, en 2 horas y 34 minutos
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‘Aces’:
1/1 -
Dobles faltas:
4/4 -
Primeros servicios dentro:
56/66% -
Puntos ganados con primer saque:
55/58% -
Puntos ganados con segundo saque:
39/45% -
Puntos de ‘break’ convertidos:
6-13/7-10 -
Total de puntos ganados:
75/85
Fue apenas un espejismo. El balear encadeno seis juegos y tuvo tres ‘break points’ en el primer juego de la segunda manga, pero fue entonces cuando el partido giró definitivamente a favor de Moller, con su rápido giro de hombros y, sobre todo, un golpe dominante, el revés cruzado con apoyos. Palo tras palo, con más aciertos que errores, con su rival jugando muy lejos de la línea, haciéndole daño sobre su segundo saque, se comió al español, que le dejó mucha iniciativa.
Del 6-2 al 1-6 y un tercer set que estuvo más igualado. Pero cuando se esperaba que Munar impusiera su experiencia, su jerarquía, porque no hay que olvidar que está en el mejor punto de su carrera por ‘ranking’y resultados, no lo logró.
Jaume Munar, concentrado en un saque.
EFE
Moller, que ganó los Challengers de Iasi y Oeiras ese curso y esta a punto de acceder al ‘top 100’, es de la edad de Rune y de Alcaraz, del que recuerda con orgullo que lo ganó con 12 años, y su tenis de lenta irrupción, va camino de lograr ese objetivo. En el momento clave, con 4-4, logró el quiebre definitivo instantes después de unos síntomas de calambres, pero cerró a su favor la batalla.
Antes el primer punto de la eliminatoria en Puente Romano (Marbella) tampoco se quedó en casa. Con cierto suspense durante los primeros tres cuartos de hora de partido, pero Holger Rune (11º del ATP Ranking) fue un examen demasiado exigente para una buena versión de Pablo Carreño (123º), un ‘top 20’ mundial hasta el verano de 2023, antes de permanecer de baja casi un año (en dos tramos prolongados de 2023 y 2024) para recuperarse de una lesión de codo.
Holger Rune suelta la derecha en suspensión ante Pablo Carreño.
EP
Desde entonces Carreño, a sus 34 años, ha dejado de ser aquel Carreño, ‘top ten’ incluso en 2017. El 5-7 y 3-6 final (en una hora y 39 minutos) solo indica que no fue un triunfo plácido, pero poco más. Ferrer se decantó para torear en la apertura de la eliminatoria confiado en su experiencia y aplomo. Tenía grandes recuerdos de Puente Romano, donde ganó en 2020 aquel ATP 250 auspiciado por la Junta de Andalucía y AnyTech 365, que no tuvo continuidad, y había estado ya la semana previa preparándose en tierra en el Challenger de Sevilla (derrota en cuartos ante Lajovic), pero fuera del ‘top 100’ ya en los últimos meses, Rune era demasiado toro, más allá de ese engañoso 3-1 en el cara a cara, porque el último duelo, más parecido a las circunstancias actuales, fue un 6-1 y 6-3.
Lo mejor de Carreño se vio en los primeros minutos. Amenazó de salida con 0-40 a Rune en el primer juego, pero no fue ahí, sino en el siguiene turno al resto, pese a un 40-15 cuando logró el ‘break’. El danés sintió que tenía que dar un punto más de agresividad, y arriesgó con puntos más cortos y jugando incluso resto-red, e igualó el choque y se fue arriba cuando presionaba con 6-5 sobre el saque del español. Olió la sangre y quebró para dominar el primer set en 57 minutos, con un 22-13 en ‘winners’, lo que demostraba su iniciativa en el juego.
Pablo Carreño (123º) cae ante Holger Rune (11º) por 5-7 y 3-6, en 1 hora y 39 minutos
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‘Aces’:
2/8 -
Dobles faltas:
2/1 -
Primeros servicios dentro:
62/55% -
Puntos ganador con primer saque:
69/72% -
Puntos ganados con segund saque:
35/55% -
Puntos de ‘break’ convertidos:
2-5/4-4 -
Total de puntos ganados:
52/66
Rune encadenó cinco juegos seguidos, al colocarse 3-0 en el segundo set después de otro ‘break’. Tras una reacción de Carreño, para poner el 3-3, volvió la presión de Rune para otro quiebre ya decisivo. Al español le cegó el sol (en una jornada tórrida, frisando los 30 grados) en un ‘smash’, y tuvo mucho que ver en ese 3-5 y saque del de Gentofte para definir el choque con un turno en blanco al saque.
La derrota española confirmó una curiosa circunstancia, pese al peso que suele tener actuar como local en esta competición, eligiendo superficie. En las siete series de esta segunda ronda de los Qualifiers (antesala de la Final a 8, con Italia ya clasificada como anfitriona para el desenlace en Bolonia, del 18 al 23 de noviembre), todos los primeros partidos acabaron con victoria visitante, y en cinco de ellas con un cero a dos de salida.
Pablo Carreño, en un servicio.
REUTERS
Ahora España tiene que empezar ganando el punto de dobles, desde las 11.30 horas este domingo y, lo más difícil, que Rune salga derrotado en el cuarto partido, previsiblemente ante Munar. Sólo entonces habría quinto choque, más abierto. En todo caso, España no pierde en casa en la Copa Davis en tierra, la superficie más habitual de formación de casi todos sus jugadores, desde 1999 (ante Brasil en Lérida).