España disputaba este fin de semana la eliminatoria previa a las finales de la Copa Davis 2025 ante Dinamarca. Lo hacía sin Carlos Alcaraz y sin Alejandro Davidovich. El sábado 13 fue una jornada negra para los tenistas de David Ferrer, que perdieron los dos primeros partidos, teniendo que lograr una remontada en la jornada dominical.

En el dobles que abría el domingo, la selección española se hizo con el primer punto de la eliminatoria y se colocó 1-2 en la serie. El siguiente partido enfrentaría a Pedro Martínez ante Holger Rune.

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Rubén Rodríguez

Durante este cuarto encuentro de la eliminatoria, se vivió un momento de tensión. El tenista danés se las tuvo varias veces con la grada de Marbella, ya fuera con miradas desafiantes o llevándose el dedo a la oreja tras ganar un punto hacia una parte de la afición que celebraba sus errores.

Hubo un momento del encuentro en el que después de un break, Rune mandó dos pelotazos fuera de las instalaciones de Puente Romano, algo que le acarreó un warning. Esto fue calentando el partido.

Pero lo que dinamitó el enfado del entrenador de España David Ferrer fue cuando recibió un toque de atención por parte del juez de silla por animar a su jugador. El extenista valenciano le dijo al supervisor de la ITF: «Escúchame tú a mí. En el primer set se cagó en la puta de los aficionados, y luego tiró dos bolas, y no le pitaste ni un penalty ball. Y ahora le animo yo y este tío viene a decirme algo. ¡Que ni se le ocurra decirme algo! Te hablo en español porque me entiendes perfectamente. Cuando pega a esa bola tiene que ser penalty ball, y le ha dicho ‘fuck off’ a la grada».

Justo en el siguiente juego, Rune le pegó de forma involuntaria un pelotazo a Pedro Martínez, que provocó que el juez de silla le pidiese calma al danés, algo a lo que Ferrer reaccionó con una risa irónica y el pulgar hacia arriba.