con los tambores de guerra de la Ryder Cup resonando, Scottie Scheffler sigue agrandando su palmarés. En una efeméride redonda, su sesquicentenario, 150 torneos en el PGA Tour, el número 1 mundial sumó otra victoria en el Procore Championship de Napa (California).
La imagen más común del golf mundial, un tipo grande, con una sonrisa enorme, que no le da importancia a la tensión del deporte porque sus metas no son terrenales y pegado a un trofeo, volvió a repetirse. Por sexta vez en el curso, una hazaña, que adquiere valor de saga porque ya lo hizo el año pasado. Desde 1960, sólo tres jugadores lo han logrado en la historia: Arnold Palmer, Jack Nicklaus y Tiger Woods. Queda todo dicho.
Scheffler, con 67 golpes, remontó dos golpes de ventaja a Ben Griffin en la última jornada para imponerse por un golpe sobre un golfista que también demostró una temporada notable. Fue el undécimo top 10 del curso, algo que sólo Scheffler puede igualar Griffin vio como el mejor jugador del momento enjugó en el fin de semana los ocho golpes de distancia con los que había llegado al viernes.
«Siempre me concentro al máximo en mi preparación para los torneos; eso es lo que me da confianza, y siento que estoy lo mejor preparado posible para la Ryder Cup. Creo que todos estamos emocionados con este torneo», dijo. «Tenemos tres días en Nueva York para competir y divertirnos. Todos lo esperamos con ilusión».