Las imágenes de Alexander Zverev en la Rafa Nadal Academy de Mallorca junto a Rafa y Toni Nadal han disparado infinidad de rumores durante estas semanas posteriores a Wimbledon. Ahora, el alemán ha desvelado todos los detalles de esa posible colaboración entre el ganador de 22 títulos de Grand Slam y su tío de cara a los retos que aparecen en el horizonte para él.

Lo hizo en su comparecencia en el Media Day del Masters 1.000 de Canadá, donde fue preguntado por el trabajo en España en las últimas semanas.

«La estancia en Mallorca fue increíble. Pasé unos diez días allí, trabajé muy duro y también lo disfruté mucho. Creo que Toni también lo disfrutó. Estoy intentando convencerlo para que pase más semanas conmigo, ya veremos cómo va, pero es un hombre muy ocupado», dijo sin esconder su intención de colaborar con el tío de Rafa Nadal.

Eso sí, reconoció que es algo complicado: «Tiene muchas citas a las que ya se ha comprometido este año, así que no estoy seguro de cuánto lo veréis este año, porque ya ha dado su palabra para muchos eventos. Pero estamos hablando de cómo podría ser una posible colaboración, sin duda, y, sí, probablemente pueda daros más información dentro de unas semanas, cuando sepamos más. Pero, sí, disfruté de mi estancia allí, eso es seguro».

Curiosamente, el alemán habló sobre el momento en el que apareció esta oportunidad de colaboración: «Después de Wimbledon se puso en contacto conmigo. Le agradecí mucho que lo hiciera. Hablamos por teléfono durante aproximadamente una hora y media, intercambiamos algunos mensajes y luego decidimos ir a Mallorca para verlo. Pero él es una persona que, en mi opinión, es un gran entrenador, sin duda alguna, pero también es alguien que te puede dar mucha confianza, porque cuando él habla y cuando Rafa habla, uno escucha. Sí, sin duda pasaron muchas horas hablando conmigo y me dieron una gran perspectiva».

También detalló su experiencia en esas charlas con Rafa, que, según él, le dieron perspectiva sobre lo que supone jugar contra él mismo: «Rafa me dio una gran perspectiva de lo que realmente es jugar contra mí, porque me veía como jugador y ahora también me veía como espectador. Fue muy útil y, de nuevo, pasamos horas y horas hablando, a veces hasta pasada la medianoche en algunas cenas y cosas así. Así que fue genial estar allí», zanjó al respecto.

El alemán ha vivido un tiempo turbulento en lo deportivo y parece seguir en busca de un impulso que le permita subir su nivel de competición. Ya entrenó con Ferrer, Ferrero y Sergi Bruguera, pues reconoce que los entrenadores españoles le dan un ‘plus’, por lo que ahora estaría buscando la solución en el entrenador que convirtió a Rafa en el más grande.