Sada inaugurará el próximo 27 de septiembre un museo dedicado a la obra de Eduardo Fernández Rivas, ese «pintor original, libre de influencias frívolas», en palabras de la crítica de arte inglesa Lavinia Morrison, que falleció hace casi diez años, en noviembre de 2016.
A iniciativa de su familia más directa, la casa de Fiunchedo en la que nació y se consagró como artista, se convertirá en una galería que permitirá conocer la obra «que parece realizada por pintores distintos», destaca su hermano, Farruco, uno de los impulsores de esta casa-museo.
Esta vivienda de la Rúa Fiuchedo 13 «está llena de cuadros de distintos estilos», lo que permite mostrar la versatilidad de un artista con la exposición de hasta «16 estilos distintos de pintura, donde ninguno se parece a otro», explican. Los impulsores de esta casa museo agradecen el apoyo de instituciones como el Concello de Sada y la Diputación y la asesoría de entidades culturales, especialmente la asociación Irmáns Suárez Picallo.
La iniciativa para reivindicar la obra de este artista es similar a la impulsada hace años por el Ayuntamiento de Curtis, en colaboración con la Diputación de A Coruña, para acondicionar un museo en la antigua casa de Antonia Dans. En los últimos meses, el nombre de Eduardo Fernández Rivas, ha salido a relucir en los plenos al hilo de una iniciativa del PP para reconocer y divulgar el legado de personalidades sadenses como Rivas, Gandullo, Ana Sastre o Sergio Vázquez, entre otros.