España sorprendió el año pasado como la economía avanzada con mayor crecimiento del mundo. El PIB se expandió a un ritmo del 3,2%, un porcentaje que ahora el Instituto Nacional de Estadística (INE) corrige y mejora en tres décimas, hasta el 3,5%. Así lo ha estimado en su última revisión estadística, publicada este viernes, en la que también actualiza las tasas de crecimiento de los dos años anteriores con una de cal y otra de arena: el avance del PIB en 2023 fue inferior en dos décimas a lo observado inicialmente, situándose en el 2,5%, mientras que en 2022, en pleno rebote pospandemia, fue dos décimas superior (6,4%).
La corrección conocida este viernes responde a la revisión ordinaria de contabilidad nacional que la oficina estadística realiza con cadencia anual y que abarca periodos de tres ejercicios, y que desde la pandemia hasta ahora siempre había supuesto ajustes al alza. La actualización para los cursos analizados en esta ronda, 2022, 2023 y 2024, conduce a una estimación del PIB anual a precios corrientes de 1.594.330 millones de euros el año pasado, un 0,2% superior al nivel inicialmente estimado.
Estos ajustes al alza o a la baja se deben a la actualización de estadísticas y datos, por ejemplo de comercio exterior o los deflactores, y a la incorporación a los cálculos de fuentes adicionales de información que no estaban disponibles en un primer momento. La revisión anual precedente ya apuntaba a que la recuperación pospandemia había sido más intensa de lo previsto.
Cada cinco años el INE también realiza una revisión extraordinaria del PIB, en cumplimiento de los compromisos asumidos a nivel europeo y según las recomendaciones internacionales, en la cual se pone bajo la lupa toda la serie estadística de contabilidad nacional, que arranca en 1995. La última de estas actualizaciones de larga escala se ejecutó el año pasado —la próxima será en 2029—, y determinó que el nivel del PIB a precios corrientes fue, en promedio, un 0,5% superior en todos los ejercicios al nivel registrado en la anterior revisión extraordinaria, de 2019.
Ese ajuste al alza de medio punto se debió en gran medida a correcciones en la estimación del censo, en el sentido que se concluyó que la población era mayor a la estimada inicialmente.
La economía española creció un 0,7% en el segundo trimestre de este año, una tasa que ha sorprendido por su vigor y que ha empujado al alza las previsiones de crecimiento para el año. El Gobierno las elevó en una décima, del 2,6% al 2,7%; el Banco de España subió su pronóstico hasta el 2,6%, el mismo porcentaje que prevé Funcas para 2025 tras mejorar sus estimaciones para el ejercicio.
[Información de última hora, habrá ampliación en breve]