Tokio

La española María Pérez, con un tiempo de 1h25:54, logró este sábado la medalla de oro en los 20 kilómetros marcha de los Mundiales de atletismo que se disputan en Tokio y revalidó la doble corona conquistada hace dos años en Budapest junto a los 35 km.

La medalla de plata fue para la mexicana Alegna González (1h26:06), con récord continental de Centroamérica, y el bronce para la japonesa Nanako Fuji (1h26:18), con récord nacional.

María Pérez es una atleta descomunal, la mejor marchadora española de la historia y la gran referencia de la marcha mundial en los últimos años. En Tokio lo volvió a demostrar con dos medallas de oro, en los 35 y 20 kilómetros marcha, que la encumbran al olimpo como única atleta única. De hecho, solo una marchadora ha logrado cuatro preseas doradas seguidas en Mundiales. Fue la china Hong Liu, que ganó el oro en los 20km en Daegu 2011, Moscú 2013, Pekín 2015 y Doha 2019. Cuatro medallas en ocho años pero participando en una sola prueba por campeonato, no en dos como la granadina.

La marchadora española, de 1,56 metros de estatura y entrenada por Jacinto Garzón, es un portento al que las rivales temen, sobre todo por la confianza que desprende desde hace cuatro años, cuando efectuó una cambios para mejorar su técnica de carrera tras el sinsabor de los Juegos de Tokio 2021 -aunque la marcha se disputó en Sapporo-, en los que fue cuarta, y en los Mundiales de Eugene, dónde fue descalificada en los 20 y 35 km.

A diferencia de hace una semana, cuando el calor fue un protagonista destacado, en esta ocasión la carrera dio el pistoletazo de salida con 26,3 grados de temperatura y una humedad del 67%, algo que benefició a las marchadoras, que no sufrieron tanto en el asfalto.

Desde el primer momento se montó un grupo cabecero con más de diez marchadoras, incluidas la mexicana Alegna González, la peruana Kimberly García León, la ecuatoriana Paula Torres y la española María Torres, que siempre fueron marcando el ritmo.

Ese grupo aguantó hasta casi la mitad de la carrera, cuando empezó a menguar porque los kilómetros empezaron a hacer mella. Una de las que más sufrió fue la italiana Antonella Palmisano, que pagó el esfuerzo de hace una semana, igual que Paula Torres, que renunciaron a la victoria en el ecuador del recorrido.

Las siguientes en desfallecer fueron Kimberly García León, doble campeona del mundo en Eugene 2022, y las chinas Quanming Wu y Jiayu Yang, que dejaron el triunfo en manos de tres atletas: María Pérez, Alegna González y la japonesa Nanako Fuji, que fue impulsada por los numerosos aficionados nipones que poblaron las calles del recorrido.

En el momento clave, pasado el kilómetro 16, María Pérez cambió el ritmo y se quedó sola. Ninguna pudo seguirla. Así fue ganando metros hasta volver a disfrutar de la vuelta al estadio completamente sola. Al cruzar la meta, un gesto de rabia pero también de felicidad. Mantiene la corona y sigue su reinado.

Por detrás llegaron Alegna González, la «favorita» según dijo la propia María hace una semana, y Nanako Fuji, que emocionada dio la vuelta de honor al estadio para recibir el calor de sus compatriotas, que vieron como estuvo a un paso de perder ese bronce ante el empuje de Paula Torres, que llegó en meta inmediatamente justo después.

La peruana Kimberly García León fue quinta (1h26:22) con récord nacional, la española Antía Chamosa (1h27:55) séptima, con marca personal; la también peruana Mary Luz Andia décima (1h28:52) y la brasileña Viviane Lyra (1h29:02) duodécima.

La ecuatoriana Magaly Beatriz Bonilla concluyó vigésima (1h30:39) y la española Paula Juarez (1h31:50) vigésimo segunda.

Paul McGrath se hace con el bronce en los 20km

El español Paul McGrath, medallista de bronce en los 20 km marcha de los Mundiales de Tokio, dijo que la medalla conseguida este sábado supone «un sueño hecho realidad» y desveló que antes del viaje a Japón, como creyente que es, fue al monasterio de Montserrat a «pedir ayuda».

McGrath, de 23 años y entrenado por Alejandro Aragoneses, cumplió los pronósticos que le situaban como uno de los favoritos a las medallas en Tokio y refrendó con este bronce mundial la progresión que está teniendo y que ya en 2024 se tradujo en un subcampeonato de Europa en Roma y este 2025 en la victoria en Podebrady (República Checa) en el Campeonato de Europa por equipos.

«Hubo un momento, cuando me sacaron el segundo aviso, que tenía que decidir si seguir forzando o mantener un poco la calma y la mente fría. Estando con dos avisos y jugándome las medallas prefería conservar una a meterme en un lío», dijo McGrath, en la zona mixta del Estadio Olímpico de Tokio.

«En el tramo final me pasaron Caio Bonfim y Zhaozhao Wang como dos aviones y vi que ese era un ritmo en el que no iba a ir forzado. Preferí quedarme con un bronce que me hace muy feliz y que supone un sueño hecho realidad», comentó el atleta español, que se torció un tobillo alrededor del kilómetro 17 que no le impidió seguir marchando.

«En el final estaba muy preocupado. Había un momento que lo vi todo muy negro pero también pensé que me podía ir bien. Soy creyente y fui al monasterio de Montserrat a pedir ayuda», subrayó.

El objetivo grande de Paul McGrath es poder estar en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles dentro de tres años. «Es mi sueño y para lo que entreno cada día».

«Es mi gran objetivo y la motivación es poder estar ahí luchando por una medalla», comentó el pupilo de Alejandro Aragoneses, un técnico «excepcional» que está guiando su carrera.

«En España tenemos unos entrenadores geniales y comprometidos. Este año, en verano, estuvo conmigo de concentración cuando estaba de vacaciones con su familia. Trabajaba de nueve a cinco y luego ya se iba con ellos», concluyó.