Fondos de inversión, promotoras inmobiliarias y hasta Novak Djokovic han comenzado a moverse para tratar de quedaerse con el Manolo Santana Racquets Club de Marbella. La viuda del tenista madrileño, Claudia Rodríguez, controla actualmente este complejo deportivo levantado en suelo público, pero la concesión expira en unos meses y ya hay interesados en adjudicarse sus 10.000 metros de suelo.
Las instalaciones se ubican en una zona premium de la localidad malagueña y a menos de 10 minutos en coche de Puerto Banús. En 1996, Eventos 2000 SL, una mercantil del ayuntamiento que entonces dirigía Jesús Gil, entregó a Santana una concesión para que construyera en Marbella su propio club de tenis. El doble ganador de Roland Garros usó como vehículo la sociedad Rolwin SA. El proyecto abrió un año después y ha permanecido operativo desde entonces.
El complejo, con 1.000 socios, dispone de tres pistas de tenis rápidas, dos de tierra batida y una de hierba; cuatro pistas de pádel; una piscina y una casa club con tienda, restaurante y sala multiusos. Aunque la concesión sigue en manos de Rolwin SA, esta mercantil apenas tiene actividad. La viuda de Santana está usando una segunda sociedad llamada Racquets Club Marbella SL para la explotación del negocio.
Según las cuentas presentadas en el Registo Mercantil, Racquets Club Marbella SL facturó en 2024 un total de 876.938 euros y obtuvo unos beneficios de 173.113, pero la esencia de su actividad amenaza con evaporarse en breve. La concesión termina el próximo 2 de mayo de 2026, según han explicado a El Confidencial fuentes municipales y ya han contactado con el consistorio algunos inversores que ven sencillo aumentar sus números mejorando sus infraestructura y buscando otras vías de ingresos.
Claudia Rodríguez, viuda de Manolo Santana junto al hijo que tuvo con el tenista, Christian Tuaty, en la final individual masculina del Mutua Madrid Open, en mayo de 2024. (EFE/Chema Moya)
Oficialmente, el Ayuntamiento está obligado a convocar un concurso para elegir al nuevo adjudicatario de los terrenos públicos. Sin embargo, la corporación que preside la popular Ángeles Muñoz ha trasladado a la viuda de Santana que la apoyará para que pueda continuar controlando el complejo, aunque no está claro cómo lo hará. La ley no deja margen para la discrecionalidad.
Fundación Manolo Santana
Pese a ello, Claudia Rodríguez ya ha dado algunos pasos. En paralelo a la guerra judicial que libra con los cinco hijos que tuvo Santana con parejas anteriores por el control de la herencia del tenista, Rodríguez ha constituido una entidad supuestamente sin ánimo de lucro, Fundación Manolo Santana Racquet Club, que usará para optar la nueva concesión. Ni la viuda del tenista ni el Ayuntamiento de Marbella han respondido a las preguntas de El Confidencial sobre sus planes para el club.
El plan de Rodríguez es que su nueva Fundación se adjudique el otra vez las instalaciones y, a continuación, aliarse con un inversor que ponga el dinero necesario para mejorar unas instalaciones que se han quedado obsoletas y explorar otras posibles áreas de negocio, como la construcción de un hotel. La propia Rodríguez ha mantenido ya reuniones con empresarios para trasladarles que mantendrá la administración del club, aunque el consistorio ni siquiera ha puesto en marcha el proceso de la nueva concesión.
Otros inversores pretenden presentarse al concurso por libre. Entre los interesados está el serbio Novak Djokovic, ganador de 24 títulos de Grand Slam y uno de los mejores tenistas de la historia. Djokovic visita con frecuencia Marbella y ya ha traslado a su entorno que le gustaría liderar la nueva etapa del club Manolo Santana. En los 22 años que lleva en activo ha levando 100 títulos y ha conseguido premios por valor de 170 millones de dólares. A esta cifra se suman sus ingresos por contratos publicitarios. A Djokovic le gustaría colocar en la dirección de las instalaciones a uno de sus dos hermanos, que también fue tenista profesional.
Fondos de inversión, promotoras inmobiliarias y hasta Novak Djokovic han comenzado a moverse para tratar de quedaerse con el Manolo Santana Racquets Club de Marbella. La viuda del tenista madrileño, Claudia Rodríguez, controla actualmente este complejo deportivo levantado en suelo público, pero la concesión expira en unos meses y ya hay interesados en adjudicarse sus 10.000 metros de suelo.