El Grupo Renault ha inaugurado de forma oficial este jueves en Valladolid su segunda planta de ‘Refactory’ después de la de Sevilla y que está dedicada a reacondicionar unos 3.000 vehículos usados al año.
Un nuevo centro que forma parte “una hoja de ruta para cumplir con la ley, ser competitivos y estar en la vanguardia tecnológica del vehículo eléctrico”, según ha explicado el presidente de Renault Group España, Josep María Recasens, en un acto en el que también ha participado el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
Un espacio de 3.000 metros cuadrados en el que los coches usados pasan por un circuito de 150 puntos para convertirlos en un ‘de control kilómetro cero’ en un proceso con cabinas de pintura con 0 emisiones de CO2, trazabilidad en toda la gestión a través de Inteligencia Artificial y que, por el momento, emplea a una veintena de personas con la intención de triplicar su plantilla en próximos meses.
El presidente de Renault Group España ha enmarcado la apertura de este nuevo centro en el cumplimiento de la legislación europea en materia de descarbonización, la adaptación al nuevo contexto geopolítico y la responsabilidad con el medio ambiente, ya que el sector consume en torno al 80% de materiales como el paladio, el rodio o el cobre.
Además, ha destacado la aplicación de la regulación sobre el vehículo eléctrico (un sector dominado por actores asiáticos) y la escasez de materias primas que, a su juicio, representan “una pieza angular de una trayectoria de descarbonización, competitividad y rentabilidad, porque de esto también va el ‘business’”.
“Tenemos que asegurar que sostenibilidad, competitividad y resiliencia económica vayan de la mano, no una por delante de la otra”, ha aseverado.
‘Refactory Valladolid’ se une a las fábricas de economía circular de Flins (Francia) y Sevilla, que organizan su actividad en torno a cuatro pilares: la prolongación de la vida útil de los vehículos; la producción, almacenamiento y gestión de energía verde, la optimización de recursos materiales y una apuesta por la innovación, a través de intercambio de conocimiento y la formación.
“Embrión” en sostenibilidad
Por su parte, el director general del Polo Iberia Vehículo de Renault Group, José Martín Vega, ha destacado que la fábrica vallisoletana tendrá un papel fundamental en el futuro de la empresa, ya que representa “un embrión de lo que va a suponer dentro de unos años”.
“Dentro de poco tiempo, seguramente estemos haciendo lo mismo con baterías de vehículos eléctricos y de vehículos híbridos y fijaos en el potencial de actividad que tenemos a medida que va creciendo la electrificación del parque de vehículos”, ha asegurado.
Vega también ha incidido en el peso de la automoción española, lo que le sitúa como el segundo de productor de Europa y el noveno del mundo, con nueve marcas instaladas, así como ha destacado el peso en la producción de Renault de la tres fábricas españolas (Sevilla, Palencia y Valladolid).
“De los 2,4 millones de vehículos que el grupo Renault fabricó en 2024, el 15% se hicieron aquí y al menos el 50% de todos los vehículos híbridos del grupo se fabricaron en España, en Palencia y en Valladolid”, ha subrayado, antes cifrar la producción global de la empresa para el próximo años en 350.000 vehículos y con “cinco coches bandera”.
“Hito fundamental”
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha calificado esta inauguración como “un hito fundamental” y “una buena noticia” para la Comunidad y ha trasladado su apoyo a la empresa y a sus trabajadores. “En Castilla y León somos automoción”, ha aseverado, antes de insistir en que la nueva movilidad “tiene que ser justa, flexible, adaptada al mercado y, sobre todo, garantizar la viabilidad de los proyectos industriales, de la competitividad y también del empleo”.
En este sentido, ha destacado que ha trasladado a través de diferentes ámbitos como el Comité de las Regiones, la necesidad de reducir la regulación y la burocracia para apoyar las inversiones en el sector privado, así como ha recordado que la Junta ha reclamado al Gobierno que garantice y que refuerce el suministro energético.
Por su parte, el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha recordado el “matrimonio” entre Renault y esta ciudad desde la instalación de su factoría en la ciudad en años 50, lo que ha permitido “crecer y tener más progreso social” y ha coincidido con Mañueco en que la transición al vehículo eléctrico se debe hacer de forma “ordenada, inteligente y planificada” y no dar “un volantazo”.
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También ha valorado la implicación de Renault su apuesto por los recursos humanos pese a la “incertidumbre” que en ocasiones vive en el sector y ha apuntado al talento que “a veces se escapa y se nos va a lugares y sitios que no tienen la tecnología punta que tenemos aquí”.