El Balonmano Nava firmó este fin de semana su primera victoria de la temporada en un contexto inmejorable: ante su afición, en plenas fiestas patronales y con el equipo todavía en fase de construcción. El conjunto dirigido por Álvaro Senovilla logró imponerse a Cangas en un encuentro exigente, marcado por la necesidad de ambos equipos de sumar sus primeros puntos tras caer en la jornada inaugural.
Además de la importancia de los dos puntos, el choque sirvió en clave navera para continuar reforzando la confianza de un grupo que continúa asentando piezas nuevas y afinando su engranaje colectivo. La aportación de múltiples goleadores, el carácter defensivo mostrado en momentos clave y la respuesta del equipo en situaciones de presión como la recta final del choque evidencian que el trabajo de pretemporada comienza a dar frutos. Nombres como Joao Bandeira, Pablo Herranz, Patotski o Buda asumieron protagonismo individual, pero el valor principal del triunfo residió en la actuación coral del bloque.
Ahora, con el primer objetivo cumplido, el Balonmano Nava podrá afrontar con mayor tranquilidad el siguiente reto: la visita a Granollers este viernes, una nueva prueba de alto nivel para seguir evaluando el crecimiento del equipo navero en este arranque liguero.