Nino Schurter cerró su brillante trayectoria profesional este fin de semana en Lenzerheide, Suiza, durante la última parada de la Copa del Mundo de Cross-Country Olímpico (XCO). A sus 38 años, el biker más laureado de la historia eligió retirarse en la pista que tantas veces lo vio ganar, en un ambiente cargado de emoción y reconocimiento.
El múltiple campeón del mundo completó su última carrera arropado por miles de aficionados que llenaron la estación alpina para rendirle homenaje. No hubo podio, ni falta que hizo. La carrera fue suya desde el momento en que decidió convertirla en un tributo a su trayectoria, saludando al público en cada curva y saboreando cada pedalada como un regalo final.
Schurter, que ha competido toda su carrera con el SCOTT-SRAM MTB Racing Team, se mantuvo fiel a la marca suiza durante más de 20 años, un hecho casi inédito en el alto nivel del ciclismo. Su vínculo con Thomas Frischknecht, su mentor y mánager, fue clave en esa relación. “Gracias a Nino, he vivido 23 años más dentro del MTB. Es una leyenda viva”, declaró Frischknecht.
La marca SCOTT también le dedicó un emotivo vídeo titulado “Thank you, Nino”, con la participación de figuras destacadas del MTB internacional. “Es nuestra mayor historia de éxito. Ha transformado este deporte y dejado una huella imborrable”, expresó Pascal Ducrot, co-CEO de la compañía.
Con 10 Copas del Mundo, 9 títulos mundiales y un oro olímpico, el legado de Schurter va mucho más allá de los números. Su impacto técnico, su visión del entrenamiento moderno y su carisma han moldeado el XCO contemporáneo. Su retirada deja un vacío que difícilmente será llenado.
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