Dicen que uno siempre vuelve a los orígenes y Mónica de los Ríos es la prueba de ello. La lista de países en los que … ha vivido esta vallisoletana no se pueden contar con los dedos de una mano pero tras 20 años en diferentes partes del mundo, la nómada digital ha decidido instalar su residencia en Valladolid, donde se ha comprado una casa y donde actualmente está con su marido y su hijo, «aunque seguiremos explorando el mundo», afirma. Con 20 años, Mónica de los Ríos se fue a Madrid, donde residió durante nueve años y desde entonces no ha vuelto a vivir en España.

«Con 28 años tenía un trabajo estable, una hipoteca y una vida muy asentada en Madrid, pero tenía muy claro que quería vivir en otros lugares del mundo, así que comencé a hacer una transición profesional para conseguir trabajar deslocalizada y poder vivir fuera de España. Lo conseguí y me convertí en nómada digital», confiesa la vallisoletana. Así pues, comenzó su aventura viviendo un año en Londres y 10 en distintos lugares de Asia, como Indonesia, Tailandia, Camboya, Vietnam, Hong Kong, Singapur, Malasia, China, Filipinas. A la lista de países que se han convertido en hogar para Mónica de los Ríos se suma el norte de África, Europa y Estados Unidos.

Mónica de los Ríos presume de haber experimentado en carne propia varias culturas, probado diferentes gastronomías del mundo y vivido múltiples tradiciones. «Lo mejor de vivir fuera de España es poder empaparme y descubrir no solamente lugares sino culturas, tradiciones y formas de vivir diferentes a la mía, lo que siento que me enriquece y me hace un poquito más sabia. Lo peor es que siempre tienes el corazón divido», apunta la mujer de 42 años.

  • Edad:

    42 años

  • Lugar de nacimiento:

    Valladolid

  • Estudios:

    Colegio Macías Picavea y El Salvador. Instituto Juan de Juni. Universidad de Valladolid

  • Profesión:

    Nómada digital con formación en Economía.

Su primer destino tras dejar Madrid fue Asia, más concretamente Bali (Indonesia). «La primera vez que llegué al país pasé los primeros días en un hotel mientras visitaba distintas villas para alquilar hasta que elegí una. Allí puedes alquilar incluso por semanas y es muy fácil, muy flexible y muy económico», recuerda la nómada digital, quien confiesa que entre sus «imprescindibles» está su ordenador porque con él puede trabajar «en cualquier lugar del mundo siempre que tenga Wi-Fi».

El empleo de Mónica de los Ríos comenzó de la mano de «’startups’ en Madrid, llegando a ser directora de proyectos digitales y a trabajar con empresas, pero totalmente deslocalizada». «A lo largo de los años he ido fundando distintos negocios digitales y todos me permiten vivir en cualquier lugar del mundo así que cuando llego a un nuevo país o ciudad lo único que tengo que hacer es encontrar un ‘coworking’ que me guste para trabajar lo más cómoda posible», esboza De los Ríos.

«Mi trabajo como nómada digital me permite trabajar desde cualquier lugar del mundo. Solo necesito mi ordenado y Wi-Fi»

Con una perspectiva de más de 20 años recorriendo, viviendo y trabajando por el mundo, Monica de los Ríos relata las diferencias más sustanciales, una de ellas, los sueldos: «en Indonesia hay una gran diferencia entre los de Europa porque también el coste de la vida es infinitamente menor». «Otra de las diferencias es que en Bali, por ejemplo, el contacto con la naturaleza es algo intrínseco en el día a día de cualquiera, el contacto con lo espiritual, sean o no practicantes, el ritmo de vida es muchísimo más pausado más contemplativo que en España», relata la vallisoletana.

Entre sus ‘hobbies’ en los diferentes países en los que ha vivido se encuentra el yoga. «Soy practicante, así que dedicó mucho tiempo a hacerlo y también a pasear por entornos naturales y soy una apasionada de la historia y la cultura, así que también dedico mucho tiempo a conocer en profundidad el país o la zona en la que estoy viviendo en ese momento. Fuera de España la gente madruga mucho para hacer y practicar deporte, así que es un hábito que he implementado en mi vida», apunta De los Ríos.

Mónica de los Ríos trabajando a distancia desde Bali (Indonesia).

Mónica de los Ríos trabajando a distancia desde Bali (Indonesia).

El Norte

El desafío al que la nómada digital tuvo que enfrentarse cuando pisó Asia por primera vez fue «aprender a montar en moto». «En muchos lugares en los que he vivido es el único medio de transporte, es decir, no hay transporte público o es absolutamente deficiente y la forma de moverte es sí o sí en moto, así que tuve que aprender a conducir moto y de hecho es lo que más echo de menos viviendo en España, el poder ir en moto durante todo el año por el clima y por la lo adaptado que está el tráfico en estos otros países porque la inmensa mayoría se mueven en moto y no en coche», puntualiza Mónica de los Ríos.

De estos 20 años viviendo fuera, la empresaria digital que ayuda a empresas confiesa que lo que más ha echado de menos es «la familia, por supuesto» y algo «que marca la diferencia vallisoletana como son las tapas, no he encontrado ninguna tan buena como las que tenemos en nuestra ciudad». No obstante, también presume orgullosa de «lo limpio que está Valladolid comparado con otras ciudades de otras partes del mundo».