Rusia ha asegurado que su economía satisface plenamente las necesidades de su Ejército y que es un gran error creer que Ucrania podría recuperar el territorio perdido. El Kremlin responde así al comentario que realizó el martes el presidente estadounidense, Donald Trump, que instó a Kiev a luchar a reconquistar el terreno ocupado por Moscú, que está, dice, «luchando sin rumbo» y atravesando «graves problemas económicos».

«El hecho de que intenten por todos los medios animar a Ucrania a continuar las acciones militares… Esta tesis de que Ucrania puede recuperar algo es, en nuestra opinión, errónea«, ha afirmado el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria. Según él, la guerra no carece de sentido, sino que había surgido de la falta de voluntad de Estados Unidos y la Unión Europea para escuchar las preocupaciones de Rusia.

Trump aseguró el martes en su red social Truth Social que «después de conocer y comprender a fondo la situación» de ambos países y tras ver los «problemas económicos» que Kiev «está causando» a Moscú, Ucrania, con el apoyo de la Unión Europea, está en condiciones de luchar y recuperar todo su territorio». Rusia, continuó, «lleva tres años y medio luchando sin rumbo fijo en una guerra que una potencia militar real habría ganado en menos de una semana«.

«Esto no distingue a Rusia. De hecho, la hace parecer un tigre de papel«, dijo Trump, que hace poco más de un mes escenificó el deshielo entre Moscú y Washington con un encuentro con su homólogo ruso en Alaska. El presidente ruso, Vladímir «Putin, y Rusia se encuentran en una gran crisis económica, y este es el momento de que Ucrania actúe», afirmó el presidente, que mencionó que la «economía de guerra» de Rusia hace que gaste la mayor parte de su dinero en su guerra en Ucrania.

El líder republicano hizo estas declaraciones poco después de reunirse con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas.

Antes de llegar al Despacho Oval, Trump prometió que pondría fin a la guerra de Ucrania en cuanto llegara a la Presidencia y presumió de su poder de convicción. En sus primeros meses en el poder, efectuó un claro acercamiento a Rusia —con quien inició negociaciones sin contar ni con Kiev, ni con Bruselas— y mostró su rechazo al líder ucraniano, con quien protagonizó un sonado encontronazo en la Casa Blanca y a quien acusó de haber «faltado el respeto» a Washington.

Sin embargo, en las últimas semanas, sus diferencias con Putin han sido evidentes. La semana pasada Trump reconoció que pensaba que la guerra en Ucrania sería «más fácil» de resolver por su relación con el jefe del Kremlin, del que aseguró que le había «decepcionado» porque había matado a «mucha gente».

Peskov: «Nuestra economía conserva absolutamente su estabilidad»

En su mensaje, Trump aseguró que a los ciudadanos rusos les resulta «casi imposible» conseguir gasolina debido a las «largas colas», además de «todas las demás» cosas que están sucediendo en lo que llama «una economía de guerra». Peskov ha respondido la economía de su país «conserva absolutamente su estabilidad, su predictibilidad», pese a «todas las sanciones ilegales, decenas de miles de sanciones impuestas».

La economía rusa, ha añadido el portavoz, «satisface completamente las necesidades» de sus Fuerzas Armadas, al tiempo que mantiene su «orientación social». «El Estado cumple y planifica con años de antelación sus compromisos sociales ante la población», ha dicho Peskov. Las declaraciones vertidas por Trump, asegura el portavoz, fueron hechas bajo la influencia del punto de vista expresado por el líder ucraniano, Volodímir Zelenski, con quien se reunió en el marco de la Asamblea General de la ONU.

Sin embargo, la postura del presidente ucraniano «contrasta absolutamente» con la comprensión rusa «del estado actual de la situación» en el frente, según Peskov, que sostiene que Kiev se encuentra en una posición «considerablemente peor» que al comienzo de la ofensiva, en febrero de 2022.

Precisamente este miércoles, el Ministerio de Finanzas ruso ha presentado un proyecto presupuestario para 2026 que se basa en una subida de impuestos de tipo general del IVA del 20% al 22%, priorizando el gasto militar.