Charles Oliveira estaba muy molesto. A tres semanas de su regreso en el UFC Río de Janeiro, el que iba a ser su rival, Rafael Fiziev, cayó por lesión y estaban teniendo dificultades para encontrarle sustituto. Finalmente, el polaco Mateusz Gamrot, octavo en el ranking del peso ligero, será su oponente. Grandes nombres de la categoría no quisieron subir a la jaula con él.
“Vi a uno diciendo esto, a otro diciendo aquello… Pero, cuando la UFC llama, ¿qué dicen? ‘Ay, no puedo. Me duele la barriga. Me rompí un dedo. Me lastimé la mano’”, se quejó Oliveira a MMA Fighting. El enfado del brasileño fue, en gran parte, por Benoit Saint-Denis. El francés venía de un gran triunfo por sumisión ante el invicto en la compañía Mauricio Ruffy en el UFC París, pero no quiso medirse con él en corto aviso. “Respetamos a Oliveira demasiado como para aceptar un combate contra él de esta manera. Este tipo de pelea requiere preparación”, justificó el representante del galo Gillaume Peltier.
El único que estaba realmente interesado en enfrentarse con Oliveira era Gamrot. El polaco, octavo en el ranking y que en 2022 ganó a Arman Tsarukyan (primero en la lista), presionó a la compañía y al entorno de Charles hasta que aceptaron ponerle como sustituto en el main event. Compartió en redes sociales un vídeo que le grabó un amigo en el que celebraba el pleito en un coche, loco de alegría.
Gamrot viene de reencontrarse con la victoria al vencer a los puntos a Ludovit Klein en mayo, después de caer ante Dan Hooker por decisión dividida el verano pasado, que cortó su racha de tres victorias consecutivas. Además, fue el último peleador en derrotar a Tsarukyan. Además de él, solo Islam Makhachev ha ganado al armenio.
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