Sergio Llull es toda una institución en el Madrid y su leyenda sigue viva como jugador madridista después de renovar por una temporada más con el conjunto blanco, la que será su decimonovena campaña de blanco. Todo un record para el menorquín, que desveló como estuvo a punto de dar el salto a la NBA.
Fue en 2015 cuando el jugador, después de ganarlo todo con el Madrid, recibió la visita de los emisarios de los Houston Rockets, con la intención de llevárselo a la NBA en un equipo donde lideraba James Harden.
“Había hecho un año muy bueno, y estuve muy cerca de irme”, confesó Llull en el podcast de la Federación Española de Baloncesto (FEB) TIMEOUT donde hizo un repaso a su carrera profesional, y donde desveló que estuvo a un paso para cruzar el Atlántico, camino de la NBA.

El base menorquín, que cumplirá 38 años en noviembre, sigue siendo un jugador válido para el Madrid / EUROLEAGUE
“Vino una delegación de los Rockets, fuimos a cenar y en la misma mesa me pusieron al teléfono a James Harden”, recuerda. “Salí convencido que me iba a Houston y se lo notifiqué al Madrid”, recordaba el veterano base blanco.
Florentino le hizo cambiar de idea
Entonces apareció en escena el presidente del club, Florentino Pérez, que lograba cambiar su idea cuando ya lo tenía claro que iba a probar la aventura estadounidense. “Me llamó y me dieron un contrato de seis años y con una mejora, aunque lejos de lo que me ofrecía la NBA. Al final, lo puse todo en una balanza y mi balanza se decantó por quedarme”, comentó.
Una decisión de la que no se arrepiente porque no ha dejado de sumar títulos vestido de blanco -en total 29 títulos en su carrera, con tres Euroligas, y nueve Ligas Endesa, entre muchos otros– y sigue siendo una referencia del conjunto madridista a pesar de que cumplirá 38 en noviembre.
Pero tanto Sergio Rodríguez, nuevo director deportivo como el flamante nuevo entrenador, Sergio Scariolo, no dudaron en ofrecerle un año más de contrato, en la que será su decimonovena temporada de blanco, sin duda, un record que le convierte en leyenda viva madridista y todavía con cuerda.