Madrid

El regreso del programa nocturno de Jimmy Kimmel este pasado martes tras una semana de suspensión rompió récords de audiencia con 6,3 millones de telespectadores en la cadena estadounidense ABC. Fue su programa habitual más visto, solo superado por los especiales que se emitieron inmediatamente después de la Super Bowl de 2006 y de la gala de los Óscar de 2014.

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Según el medio especializado Variety, esa emisión representó un incremento del 343% respecto a la audiencia media registrada en la pasada temporada. Ese récord se batió además pese a que tanto Nexstar como Sinclair, dos conglomerados de televisión locales que también emiten el programa, decidieron mantener el boicot, por lo que Jimmy Kimmel Live! no estuvo disponible en el 23% de los hogares.

Entre los adultos de 18 a 49 años, la emisión registró un 0,87% de rating, lo que supuso un aumento del 568% respecto a la media de la anterior temporada. El propio Kimmel había bromeado con el interés que anticipaba que iba a recabar su vuelta tras haber sido cancelado por sus comentarios sobre el asesinato del activista ultraconservador Charlie Kirk, sobre el que apuntó que los republicanos estaban intentando sacar rédito político.

El presidente, Donald Trump, había subrayado que la suspensión de su programa se debió en verdad a que el humorista no tenía ni talento ni audiencia. «Esta noche sí la tengo», señaló el presentador en su monólogo de regreso. Las cifras que cita Variety, adelantadas por la consultora Nielsen, tienen en cuenta solo aquellas personas que se conectaron en directo para verlo por televisión.

En la cuenta oficial del late night en Youtube, apenas 18 horas después de que se colgara el vídeo Jimmy Kimmel is back! (‘¡Jimmy Kimmel está de vuelta!’) este anotó más de 15 millones de visualizaciones. Anteriormente, el hito le correspondía al video en el que Kimmel hablaba sobre los detalles del nacimiento de su hijo y su enfermedad cardíaca.

Kimmel carga contra Trump en su segundo monólogo tras su regreso

En su segundo monólogo de apertura tras volver a las pantallas, Kimmel quiso agradecer a sus espectadores el permanecer al otro lado a pesar de que en muchos territorios se haya decidido seguir vetando su presencia. «Volvemos a trabajar haciendo nuestro programa, no en todo el país durante nuestro programa, para la mayor parte del país todavía no estamos al aire en varias afiliadas de ABC, incluyendo Seattle, Portland, Washington D. C., Nashville, Nueva Orleans, Saint Louis, Salt Lake City, y alrededor de 30 más», ha dicho.

«Si estás viendo desde una de esas ciudades, debes saber que la persona que a quien estás viendo ahora mismo no soy yo, ¿de acuerdo?», ha bromeado, sobre que muchas afiliadas de la cadena hayan decidido mantener otras alternativas a Jimmy Kimmel Live!

Tras esto, Kimmel ha querido azotar a Donald Trump bromeando con alguien del público que gritaba desde la grada mientras hablaba el presentador. «¡Cállate la boca! La libertad de expresión es solo para mí, no interrumpas al presidente», ha dicho, sobre las críticas del presidente republicano.

«Hay mucha gente que piensa que deberían sacarme del directo por burlarme de Donald Trump, así que quiero explicar que hablo de Trump más que nada porque es un matón. No me gustan los matones. Donald Trump es un matón al estilo de las películas de los 80 que te quita el dinero del almuerzo y si se lo das una vez, te lo quitará de nuevo. Dos cosas le encantan: el almuerzo y el dinero. Bueno, tomará ese sándwich de mantequilla de maní y mermelada que tu madre cortó por la mitad como un triángulo para ti. Se lo devorará frente a tu cara y luego también se comerá tu pequeña bolsa de Oreo», ha dicho, ironizando sobre la actitud del presidente.