Mike, conocido este mundo como Ostrawsky, es un artista que solo utiliza dos materiales: agua marina y arena. A partir de aquí, utiliza cubos, para las mezclas, y palas y pinceles, para dar forma a sus materiales. Solo con estos dos objetos, y mucha paciencia, llega a hacer figuras tan espectaculares que detienen a los transeúntes del paseo de la playa de Silgar, en Sanxenxo, a observar sus obras.
De origen checo, llegó a España hace 20 años. Primero en Barcelona, donde en la playa de Sitges descubrió a unos jóvenes que hacían este tipo de arte y le impresionó lo que hacían: «Dije ¡qué chulo! Es una manera diferente de ganarse la vida», afirma. Residió en otros lugares del litoral español, como Málaga, hasta que llegó a Galicia. Por el camino, trabajó en otros sectores artísticos y de la hotelería.
Mike trabajando en una de sus obras. DP.
A Mike el arte siempre le apasionó ya que «de pequeño ya que me gustaba dibujar y pintar». Se puso manos a la obra «sobre el 2005», hace ya 20 años. Después de tanto tiempo trabajando en este mundo asegura que, a día de hoy, «sigo aprendiendo», lo toma como un aprendizaje continuo.
En su repertorio existen muchas figuras. El artista intenta acomodar su trabajo al público «depende el ambiente que haya en esos momento, si hay muchos niños pues hago dragones o dibujos animados«. ¿Dónde encuentra la inspiración? «De juguetes o dibujos animados que veo en las tiendas y en la calle». Algunas figuras, como el poblado en la montaña de la imagen, pueden llegar a tardar «hasta 12 horas». Unas jornadas de trabajo interminables que empiezan a las «10 o 10:30 cuando bajo a la playa y hasta la noche». Para él «no es cuestión de dinero, es más una forma de vida». Asegura que, para él, va algo más allá de lo monetario «esto es como libertad y me puedo expresar».
Hoy en día, sus obras son uno de los clásicos que decoran una pequeña parcela de la céntrica playa sanxenxina. Una incontable cantidad de gente se detiene a observar el proceso o su obra final mientras recorre la zona. Hay que darse prisa para ver sus figuras, ya que, por motivos familiares, es el último verano que su arte estará presente por esta playa.