Era la principal incógnita del día en la capital nipona, cómo respondería el tobillo de Carlos Alcaraz después del susto de la primera ronda, y la prueba no pudo ser más satisfactoria para el número uno del mundo. Con un partido sólido, no mostró aparentes problemas físicos y se movió con aparente normalidad tras haber cancelado en la jornada del viernes su entrenamiento para preservar el estado de su pie izquierdo.
«Tuve un día y medio muy importante para recuperarme. Tengo al mejor fisioterapeuta del mundo (Juanjo Moreno)», explicó tras confirmar su presencia en cuartos de final Alcaraz, que se medirá a Brandon Nakashima este domingo. Para ello superó al belga Zizou Bergs en un partido de notable nivel general, que acabó resolviendo gracias a su mayor pegada el español (6-4 y 6-3).
«El trabajo que ha hecho con mi tobillo ha sido estupendo. Jugué casi con normalidad. A veces estuve preocupado, pero en general hice un gran partido», sentenció Alcaraz que tendrá menos tiempo de recuperación para afrontar los cuartos de final este domingo.