La asociación Hazte Oír ha desplegado una furgoneta frente a los Juzgados de Plaza de Castilla con la imagen de Begoña Gómez, la esposa de Pedro Sánchez, con el mensaje «Penta-imputada» y vestida con un birrete. «¡Y a un paso del jurado!», se añade también en este cartel. Hazte Oír se encuentra personada como acusación popular en todas las causas judiciales que afectan a la mujer del presidente del Gobierno.
La entidad ha convocado también una manifestación delante de los Juzgados de Plaza de Castilla por la citación realizada por el juez Juan Carlos Peinado a Begoña Gómez. Finalmente, la esposa de Sánchez no se ha personado en esta citación. Tampoco lo han hecho los otros dos cargos que habían sido llamados por el magistrado este sábado: el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín Aguirre, y Cristina Álvarez, la que fuera la asesora de Gómez en Moncloa.
Esta furgoneta de Hazte Oír ha señalado los presuntos delitos por los que está imputada Begoña Gómez: malversación de fondos públicos, tráfico de influencias, corrupción en los negocios, apropiación indebida e intrusismo laboral.
La esposa del presidente del Ejecutivo tenía que acudir por quinta vez a los juzgados para que el magistrado Juan Carlos Peinado concretase su imputación por malversación y después de determinar que, si sigue adelante la causa judicial, sería juzgada por un tribunal del jurado.
El juez ve «indicios racionales de hechos delictivos»
Peinado aseguró en su auto de citación que «con las leyes de la lógica y de la empírica» podía concluir que hay «indicios racionales, fundados y sólidos de la comisión de hechos delictivos». Y reconoció que, aunque en un principio consideró que «no procedía la admisión a trámite» de la querella presentada por Vox por malversación contra Gómez y Álvarez, «la delimitación del objeto del proceso es de cristalización progresiva».
Según expuso el magistrado, llegó a esa «cristalización», en primer lugar, porque interpretaba en sentido incriminatorio el hecho de que el 10 de septiembre, cuando las citó a declarar como imputadas por malversación, Gómez solo respondiera a las preguntas de su abogado y Álvarez directamente se acogiera a su derecho a guardar silencio.
Respecto a Begoña Gómez, el instructor dijo expresamente que «las que contestó la investigada Begoña Gómez a su letrado no permiten ser tenidas en cuenta en sentido exculpatorio».