Mugello fue el escenario del regreso de Romain Grosjean a la pista al volante de un monoplaza de Fórmula 1, protagonista de un test TPC organizado por Haas, con el equipo estadounidense participando también en las pruebas de Pirelli para el desarrollo de los neumáticos de 2026 junto a Ferrari. Pero junto a estos dos equipos hubo otra presencia destacada: Red Bull, inmerso en un test con el joven Arvid Lindblad.
No es ningún misterio que se trata de una fase crucial para la elección de la alineación de Red Bull de cara a la próxima temporada. Isack Hadjar, de hecho, parece ahora destinado a la promoción después de sólo un año, dejando así un asiento vacante en Racing Bulls.
Un asiento que, con toda probabilidad, se cederá a un joven del Junior Team austriaco, concretamente al propio Lindblad, que actualmente participa en la F2 y cuenta con el firme apoyo de Helmut Marko como el gran talento del futuro. Al mismo tiempo, en este escenario Yuki Tsunoda y Liam Lawson competirán por el otro volante del equipo de Faenza.
Arvid Lindblad, Campos Racing
Foto de: Red Bull Content Pool
Por eso, entre bastidores, Red Bull ha elaborado un completo programa de pruebas TPC para que Lindblad pueda familiarizarse con un coche de Fórmula 1. Las primeras pruebas tuvieron lugar ya a principios de año en Imola, al volante del AT04, el coche 2023 de Racing Bulls, y continuaron a lo largo de la temporada con otras sesiones.
Una oportunidad no sólo para evaluarle al volante de un coche de F1, aunque con neumáticos de demostración y en un monoplaza que, según el reglamento, debe tener al menos dos años de antigüedad, sino también para prepararle para las sesiones de FP1 dedicadas a los novatos en las que ocuparía el lugar de los pilotos de Racing Bulls, así como el de los pilotos de Red Bull.
Lindblad, de hecho, obtuvo una exención en la superlicencia que le permitió participar en los fines de semana oficiales, como ocurrió en Silverstone, cuando se subió al RB21 en lugar de Tsunoda.
Arvid Lindblad durante la FP1 en Silverstone en el Red Bull RB21
Foto de: Erik Junius
Mientras tanto, el programa de pruebas continuó: entre el jueves y el viernes de esta semana, el joven británico completó otros dos días de pruebas en Mugello al volante de un Red Bull 2019, compartiendo pista con Haas y Ferrari, ambos ocupados en el trazado toscano en las sesiones de Pirelli dedicadas al desarrollo de los nuevos neumáticos.
Fue una oportunidad no tanto para profundizar en los sistemas del monoplaza, ya asimilados en el simulador, como para acumular kilómetros en una pista tan rápida como Mugello, con curvas de alta velocidad que ponen a prueba tanto la resistencia física del piloto como su capacidad para confiar en la carga aerodinámica, uno de los aspectos más complejos de gestionar para un debutante.
Por desgracia, la lluvia afectó a los dos días de pruebas, jueves y viernes, reduciendo las posibilidades de rodar en seco. Sin embargo, fue una valiosa oportunidad para medirse con la pista en condiciones de mojado, añadiendo una pieza más al camino de crecimiento del joven talento británico.
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