Para sorpresa de nadie, gran parte de la rueda de prensa de los campeones de la Ryder Cup el domingo giró en torno al trato que los jugadores sufrieron en Bethpage Black por parte de los aficionados. Rory McIlroy fue claramente el blanco principal de la afición estadounidense y, por desgracia, su esposa Erica también estuvo en el punto de mira pues iba siguiendo los partidos de su marido. Todo esto ha disgustado a un caballero del golf como Tom Watson.
Hay que decir que incluso Justin Thomas, quien se enfrentó a McIlroy en el fourball del sábado, reconoció que sus aficionados se pasaron: «Sin duda, se dijeron cosas desagradables, pero no creo que nadie temiera por su vida ni por ninguna situación en la que pudiera lesionarse… Supongo que así son los aficionados de Nueva York». En ese momento, JT no sabía que incluso lanzaron una lata de cerveza a Erica McIlroy. El domingo, Scheffler le echó varias miradas a su público para que se callaran antes de que su rival -McIlroy- ejecutara sus golpes.
Máxima tensión en la Ryder Cup: latazo de cerveza a la mujer de Rory McIlroy
Rory McIlroy quiso minimizar estos incidentes en la victoria y señaló que sólo “un pequeño grupo de personas” había cruzado “la línea”. Los ‘hooligans’ neoyorkinos estuvieron tratando de picar al noirlandés desde el inicio de la competición con la intención de descentrarlo y desgastarlo. Lo malo es que Rory mordió el anzuelo rápido, pues el primer día dedicó una peineta a un grupo de aficionados. Al parecer, estaban tocando temas personales que colmaron la paciencia del número 2 del mundo. El sábado lanzó un “fuck you” mientras jugaba. Y a todo esto, su rendimiento ha sido espectacular.
No creo que debamos aceptar eso en el golf
Rory McIlroy
McIlroy fue muy contundente en su mensaje: “No creo que debamos aceptar eso en el golf. Creo que el golf debería tener un estándar más alto que el que se vio esta semana. El golf tiene la capacidad de unir a la gente. El golf te enseña muy buenas lecciones de vida, te enseña modales. Te enseña a jugar según las reglas. Te enseña a respetar a la gente. A veces esta semana no vimos eso. Así que no, esto no debería ser aceptable en la Ryder Cup. Nos aseguraremos de decirles a nuestros aficionados en Irlanda en 2027 que lo que sucedió aquí esta semana no es aceptable, y para mí… creo que si fuera estadounidense, me molestaría que la gente… Es que no escuché muchos gritos a favor de Scottie hoy [por el domingo], pero sí escuché muchos gritos en mi contra. Es como, ¿por qué no apoyan a sus jugadores? Esa es la clave. Fue una semana difícil para todos, pero al mismo tiempo los callamos con nuestra actuación y nuestro juego”.
No escuché muchos gritos a favor de Scheffler, pero sí muchos en mi contra. ¿Por qué no apoyan a sus jugadores? Esa es la clave
Rory McIlroy
En cuanto a su esposa, McIlroy señaló que estaba bien: «Es una mujer muy, muy fuerte. Manejó todo esta semana con clase, aplomo y dignidad, como siempre. La adoro, y vamos a celebrarlo esta noche». Justin Rose confesó que Rory no les había contado nada sobre el ‘lanzamiento de lata’, momento en el que sí estuvo presente Shane Lowry y que captaron en exclusiva las cámaras de Movistar. Lowry, agregó: “Estuve allí dos días con Erica, y la cantidad de abusos que recibió fue asombrosa, y la forma en que estuvo allí apoyando a su esposo y a su equipo fue increíble, y mis felicitaciones a ella por eso”.
Mi esposa manejó todo esta semana con clase, aplomo y dignidad, como siempre
Rory McIlroy
Hoy, quien se ha pronunciado al respecto de todo esto es una leyenda del golf como Tom Watson, quien capitaneó al equipo estadounidense en la victoria en 1993 en The Belfry. Más de veinte años después, Watson volvió a liderar a la escuadra americana en 2014 en Escocia, en el mítico campo de Gleeneagles, esta vez con derrota.
Me gustaría disculparme por el comportamiento grosero y mezquino de los aficionados estadounidense en Bethpage
Tom Watson
El ganador de ocho Major ha expresado en redes sociales su malestar: “Me gustaría felicitar a Europa por su victoria. El juego de su equipo en los primeros días fue sensacional. Lo más importante es que me gustaría disculparme por el comportamiento grosero y mezquino de nuestros aficionados estadounidense en Bethpage. Como exjugador, capitán y como estadounidense, me avergüenzo de lo que pasó”.