Pasados ya los retos de la Copa Intercontinental de Singapur, con el éxito del título, y de la Supercopa Endesa, con la eliminación ante el Valencia Basket, en semifinales, el Unicaja pone el foco en el inminente arranque de la Liga Endesa, el próximo sábado, y de la fase de grupos de la Basketball Champions League, el miércoles de la próxima semana. Un calendario que acelera a partir de ahora y que ha aconsejado a Ibon Navarro darle tres días de descanso a su equipo, hasta este miércoles, cuando la plantilla verde y morada regresará a los entrenamientos.

El técnico cajista ya avisó desde el inicio de la pretemporada que este curso habrá que tener paciencia para ver la mejor versión del equipo, porque hay muchos cambios en la plantilla y muchos retoques que hacer. Ibon necesita un nuevo «plan» para este 2025-2026 con varios retos que afrontar.

Imagen de un entrenamiento del Unicaja previo a la Supercopa Endesa.

Imagen de un entrenamiento del Unicaja previo a la Supercopa Endesa. / ACBPhoto-Mariano Pozo

1. Hacer equipo

Después de dos veranos seguidos con muy pocas variaciones en la plantilla, este pasado mercado estival ha habido muchos cambios. Hasta 9 operaciones se han ejecutado en las oficinas de Los Guindos: 5 jugadores se han ido y 4 fichajes han llegado. Ibon Navarro y el resto del staff tienen por delante la misión de convertir una buena plantilla de jugadores en un auténtico «equipo», algo que ha definido al Unicaja estas dos últimas temporadas, en las que el grupo siempre estuvo por encima de las individualidades. Meter a los nuevos lo más pronto posible en la dinámica del resto es, sin duda, uno de los retos del nuevo «plan de Ibon».

2. Jugadores diferentes, distinto baloncesto

El Unicaja ha cambiado piezas y deberá cambiar también su juego. Los jugadores que han venido tienen unas características distintas a los que se han ido. Sulejmanovic no juega igual que Sima. James Webb III tampoco tiene mucho que ver con Dylan Osetkowski. Chris Duarte es un tipo de jugador que antes no tenía el equipo en su róster. Y Castañeda quizás es el que más se parece a su antecesor en el puesto, Tyson Carter, aunque por ahora esté lejos de su nivel. Eso quiere decir que el Unicaja ha variado piezas y también características de sus jugadores, lo que obligará a jugar un baloncesto distinto al de las pasadas temporadas.

3. Integración de Duarte

Dentro de las novedades que presenta la plantilla para esta temporada 2025/2026, Chris Duarte es un caso «especial». Es el único que no había jugado antes en Europa y viene de un baloncesto muy distinto al que se juega en España. Duarte, en los Vaqueros de Puerto Rico, jugaba una minutada y podía estar hasta 15 minutos o más seguidos en la pista. Aquí, su rol, aunque siga siendo de un jugador importante, es de aportar en tramos de minutos más cortos. Ibon Navarro tiene que conseguir sacar lo mejor de Duarte, pero en este nuevo concepto de básket al que ha llegado el dominicano. La verdad es que a juzgar por sus declaraciones, Duarte está encantado en Málaga y en el Unicaja. Y con ganas de ayudar y convertirse en lo que el Unicaja quiere de él, pero esa adaptación no va a ser fácil y la mano izquierda del entrenador y del resto del staff será importante para que el proceso dure el menor tiempo posible.

Ibon Navarro habla con Chris Duarte.

Ibon Navarro habla con Chris Duarte. / Gregorio Marrero «»»

4. Gestión de las derrotas

Desde que arrancó la temporada 2022/2023 con Ibon Navarro en el banquillo y ya con Perry, Kravish, Kalinoski y compañía en la plantilla verde y morada, el Unicaja ha ganado el 75.27% de los partidos que ha jugado en estas tres últimas temporadas. O sea, que ha ganado 3 de cada 4 partidos oficiales que ha jugado. Un registro brutal que será difícil de aguantar, sobre todo en este arranque de competición, hasta que el equipo coja su velocidad de crucero. El entrenador habló en pretemporada del «control de las expectativas» y si lo trasladamos a la propia plantilla habrá que hablar también de la «gestión de las derrotas». Este grupo no está acostumbrado a perder muchos partidos. Si llegan esas derrotas, habrá que preparar al plantel para asumirlas con naturalidad y como parte del proceso de crecimiento.

5. Búsqueda de otros «especialistas»

Ibon Navarro ha perdido esta temporada a jugadores muy importantes para jugarse la última bola de un partido. Es verdad que Kendrick Perry parece una buena opción, pero está claro que también lo eran Tyson Carter, Dylan Osetkowski y Kameron Taylor, como lo demostró este mismo domingo en el Carpena, asumiendo bolas calientes para ganar la Supercopa con el Valencia Basket. Es probable que Duarte sea una buena alternativa para ese último ataque y que en eso se trabajará desde el staff. Incluso también debería serlo Xavier Castañeda, por mucho que ahora nos parezca una quimera, pero es un jugador que también debe ser otra opción para tirarse una bola caliente que pueda decidir un título.

Mucho trabajo por delante

Seguro que hay muchos más aspectos para trabajar en este Unicaja 2025/2026, pero estos cinco retos seguro que están en la pizarra de Ibon Navarro y son aspectos en los que incidir en estos días antes de que arranque la Liga Endesa y también en las primeras semanas de la exigente temporada 2025/2026 que ya está aquí.