Durante la temporada que apura sus últimos días se han celebrado muchos mano a mano, la mayoría injustificados y sin sentido para los aficionados, incluso diría que incomprensibles, sin embargo, hay un posible mano a mano que a mí, particularmente, me gustaría mucho ver. No se trata de dos grandes figuras del toreo, sino de dos novilleros, además muy jóvenes ambos: Tomás Bastos y Julio Norte. Bastos es de Vila Franca de Xira (Portugal), tiene 18 años y debutó con picadores en Olivenza en marzo de 2024. Julio Norte es de Salamanca, tiene 17 años y debutó con caballos en abril de 2025, en la ciudad francesa de Garlin.

A Julio Norte le he visto a través de la televisión y a Tomás Batos, por televisión y en directo. Para mí, por su concepto del toreo y por su forma de expresarlo, son de lo mejor que hay en el escalafón de novilleros. Los dos tienen un concepto muy clásico, muy puro, y lo expresan de tal forma que rápidamente llegan al aficionado, no dejan a nadie indiferente, tienen eso que se suele llamar pellizco, dicen algo que llega muy profundo. En definitiva, hacen un toreo de muchísima calidad, lo que llamamos toreo caro, aunque con personalidades muy diferentes. Al menos a mí, que llevo 75 años viendo toros, desde la primera vez que les vi me calaron hondo y pensé: ¡pueden llegar a ser muy importantes en el mundo del toro, tienen muchas cualidades de las necesarias para ser figuras grandes!

Por eso, desde la primera vez que tuve la oportunidad de verles, les sigo con especial atención. En general sigo a todos los matadores de toros y a todos los novilleros, pero en este último escalafón son de los que más me han calado, de los que más me han llamado la atención hasta el momento. Ya sé que llegar a ser figura del toreo es dificilísimo, que son muy pocos los que lo consiguen, pero estos dos, con algo de suerte que tengan, pueden llegar, aunque en el toreo, y en la vida, la suerte hay que buscarla, y se busca trabajando, dedicando mucho tiempo, poniendo mucho interés en lo que sea; como decía Thomas Jefferson, tercer presidente de los Estados Unidos, «cuanto más duro trabajo, más suerte tengo», pero siempre, si la suerte ayuda un poquito, mejor. Creo que a estos dos con poco que les ayude pueden llegar.

Los empresarios que buscan carteles del máximo interés para el aficionado, tienen en estos dos novilleros la posibilidad, a mi parecer, de ofrecer algo interesante y de calidad. Si se llegase a dar ese cartel pienso que sería éxito para el empresario, para los toreros y para los aficionados, que lo disfrutaríamos mucho.