Madrid

La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha publicado un vídeo en sus redes sociales, pregrabado desde el barco Sirius –uno de los barcos de la Global Summud Flotilla–, afirmando que este vídeo ve la luz porque los han detenido ilegalmente y están «absolutamente incomunicados».

En el comunicado, Colau hace un llamamiento a la ciudadanía, pide que sea su voz, haga «el máximo ruido posible» y se presionen a los gobiernos para que les liberen y les permitan abrir el corredor humanitario con Gaza.

La diputada de la CUP en el Parlament, Pilar Castillejo, también ha difundido un vídeo pregrabado para ser publicado en caso de ser detenidos ilegalmente. «Si estáis viendo este video es porque el Estado sionista de Israel nos ha secuestrado en aguas de Palestina cuando intentábamos abrir un corredor popular para llevar la ayuda humanitaria. Eso quiere decir que la ayuda no ha podido llegar», explica en el vídeo Castillejo.

«Salid a la calle y protestad, porque es la única manera de que esta ayuda pueda llegar. Obligadles a abrir este corredor, obligadles a que el genocidio termine», añade en el video difundido por la CUP.

Los barcos de la Flotilla han sido rodeados por los buques israelíes en el mar frente a Gaza y sus ocupantes serán trasladados a Israel para su posterior expulsión, según ha avanzado el ministro de Defensa italiano, Guido Crosetto.

La Flotilla, compuesta por más de 40 barcos y más de 500 voluntarios zarpados desde costas de países mediterráneos como España, Túnez o Italia, ha sido interceptada por barcos israelíes cuando se encontraba a unas 80 millas náuticas de Gaza.

Colau: «Había un submarino muy cerca de la Flotilla»

En la mañana de este miércoles, Ada Colau ha informado a SER Catalunya de que, durante la pasada noche, tuvieron dos falsas alarmas. En primer lugar, naves del ejército israelí se acercaron a las cuatro de la mañana a ellos, pero a una distancia prudencial. A pesar de esto, los tripulantes siguieron los protocolos y salieron a cubierta con los chalecos salvavidas puestos.

Más tarde, se percataron de que había «un submarino de guerra muy cerca del barco», tal y como relataba Colau. Este acercamiento supuso la caída de las comunicaciones de su barco, junto con internet y el sistema de navegación.

Por otro lado, el pasado lunes, la radio pública israelí anunció que aviones y barcos se estaban preparando para interceptar la ayuda humanitaria que lleva la Flotilla. Colau explica que Israel afirmó que las fuerzas armadas hundirían los barcos que no pudieran remolcar tras detener a todos los tripulantes.

El Gobierno de España, por su parte, ha informado este miércoles de que el buque que enviaron desde la armada no podía continuar y entrar en la zona marcada por Israel por seguridad y para preservar la integridad física de la tripulación. También, el Ejecutivo había recomendado a la Flotilla que no continuara su viaje porque pondrían en riesgo «grave» su seguridad.

Por otro lado, el mensaje añadía que las vidas de los integrantes tenían que estar por encima de la misión «encomiable y legítima» que tenía la Flotilla. Ante este comunicado, Ada Colau ha respondido en la mañana de este miércoles que han hecho este trayecto «durante un mes con 40 barcos, cientos de personas y cargados de ayuda humanitaria, para abrir un corredor humanitario, no para hacerle caso a un estado genocida que sigue bombardeando Gaza».