En la primera temporada sin Luka Doncic desde el tormentoso traspaso que derivó en amenazas de muerte al directivo que le echó y un bajón de popularidad en una franquicia recién vendida, nuevas metas en el horizonte de Dallas Mavericks. Jason Kidd no podrá contar, más que seguro, con Kyrie Irving en la posición de base hasta primavera, si es que llega a jugar algo en la 2025/26, por la lesión en uno de sus ligamentos cruzados. Pero es una mala noticia entre otras buenas. D’Angelo Russell es el que asumirá el mando en plaza en compañía de Williams y Hardy. El joven Cooper Flagg estrena su condición de número uno después de maravillar en Duke trasladando su talento a Texas. Caras conocidas por las que se vuelve a apostar: Powell, Exum, etc. Veteranos que continúan, como Klay, o valores que tendrán que adaptarse en la cancha, caso de Christie, Marshall, Washington o Caleb Martin, a lo que se disponga. El mejor novato de la actual camada hará virar los planes si es necesario. Es la apuesta. A su lado, como jugador-franquicia consolidado, tendrá a Anthony Davis.
Y nada más llegar del verano Davis venía con una noticia bajo el brazo. Y no era positiva. “Me veréis como Horace Grant”, en relación al cuatro veces campeón (tres en Bulls, una en Lakers) y su marca distintiva: las gafas. Según le han recomendado los médicos, A.D. deberá portar las lentes de contacto en sus ojos para protegerse de más golpes. Está recién operado por la afectación de su retina y en el campus de pretemporada se le ve aún renqueante del ojo derecho. La pasada campaña sufrió ahí un fortuito golpe con el codo de su compañero Daniel Gafford. Se trató de evitar la cirugía, algo que resultó la mejor opción cuando se analizó el daño al terminar la temporada 2024/25. La sugerencia es que las lleve durante todos los partidos que dispute en la NBA hasta que finalice su carrera deportiva.
Davis y la salud son conceptos indisociables cuando hablamos de sus posibilidades tanto individuales como colectivas en la Liga. Este año, tras lo mal que acabaron el pasado, las opciones de clasificarse en posiciones de honor en la Conferencia Oeste son de nuevo múltiples. Gracias al impulso de Flagg y a tener una plantilla compensada.
No rehuye el tema. “Creo que lo más importante para nuestro equipo es nuestra salud. Mantenernos sanos. Por lo demás creo que vamos a estar bien. Estoy feliz y emocionado de estar aquí. Yo quiero ganar con los Mavs”, apuntó.
Kyrie es la baja más sensible y lo será durante meses. Pero lejos de ser una temporada de transición, como se entendería tanto para coger impulso como para formar adecuadamente a un recién llegado como Cooper Flagg, los texanos se plantean los partidos oficiales desde el punto de vista más ambicioso. Y Davis será el líder que guiará.
Como se reportó anteriormente, Davis ha conseguido lo que no en los Lakers: será el ala-pívot del quinteto titular, con Lively o Gafford actuando de ‘5′ puro para liberarle de algunas tareas defensivas, y se intentará que Flagg sea alero (junto a la versatilidad de P.J. Washington) para intentar ajustar la calidad de todos ellos durante muchos minutos.
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