La vuelta al colegio de los más pequeños ha sido un factor fundamental para que la curva de las infecciones respiratorias comenzará a ascender hace algo más de un mes. Por entonces, en la semana 35, la tasa de incidencia se situaba en 300 casos por cada cien mil habitantes, según los datos de Vigira (el programa de vigilancia de Sacyl de las infecciones respiratorias). Pues bien, según los datos correspondientes a la semana 39, publicados el martes de esta semana, la tasa de incidencia ya ha escalado hasta los 558 casos.

Si se analiza exclusivamente el virus de la gripe, la escalada también comenzó a partir de la semana 35, la última de agosto. Por entonces la tasa era de cero y en la actualidad ya ha llegado a 30 casos por cada cien mil habitantes, si bien se mantiene lejos del umbral epidémico, establecido en 50 casos. De hecho, en el último informe de Vigira, Sanidad reconoce que han aumentado las urgencias por infecciones respiratorias en menores de cinco años y en personas de más de 74.

El prestigioso microbiólogo Raúl Ortiz de Lejarazu, exdirector del Centro Nacional de la Gripe, apunta a que no solo influye la vuelta al cole en este repunte, sino el regreso a la normalidad del resto de la población. Más reuniones en la oficina, en autobuses, en el cine, etcétera. Aunque el doctor destaca el impacto que tienen estas infecciones en la población infantil para la posterior propagación. «Grandes transmisores», como los denomina. «Cuando empieza a haber durante una semana o semana y media casos de gripe en niños, en un plazo de dos semanas tenemos el inicio de la ‘otra’ gripe, eso es así siempre», señala. Con todo, sostiene que el nivel actual entra dentro de la normalidad y no será hasta «dentro de un mes y medio o dos», cuando se alcance el umbral epidémico. Con todas las reservas, porque Ortiz de Lejarazu siempre incide en la dificultad que implica predecir cómo será la temporada de gripe antes de que comience.
Según los datos de Vigira, los virus circulantes este año son AH1, AH3 y ANS.

Aumento de covid

Por otro lado, en las últimas semanas también se ha confirmado la tendencia alcista de los casos de covid, con una incidencia de 71 casos por cada cien mil habitantes en la semana 38 (del 22 al 29 de septiembre) y que llegó a estar por encima de 80 en la semana previa. Es la tasa de incidencia de covid más alta del último año. No obstante, el microbiólogo señala que esto no tiene nada que ver con la bajada de las temperaturas ni con la llegada del otoño, porque «el covid no está estacionalizado». En este sentido, añade que «hay una competencia entre los virus respiratorios, que son como los bomberos: no se pisan la manguera». Una forma de señalar que los picos epidémicos de unos y otros no suelen coincidir en el tiempo.

Ortiz de Lejarazu opina que «todavía no hemos llegado a una normalidad epidémica» después de la pandemia, pero señala que España está haciendo bien algunas cosas, como el proceso de vacunación a los niños, que son «los más hospitalizados por gripe». De hecho, en la campaña de este año Castilla yLeón ha aumentado hasta los ocho años a los niños a inmunizar frente a la gripe (antes solo era de seis a cinco años). Según los datos presentados esta semana por la Consejería de Sanidad, durante la campaña del año pasado se vacunaron en Valladolid el 65,1% de los menores de dos años y la tasa de cobertura llegó al 45,7% entre los niños de dos y cinco años.

En cambio, no está tan satisfecho con el porcentaje de vacunados mayores de 59 años, que en la provincia fue del 60,7%, ligeramente por encima de la cobertura regional en esta franja de edad. «Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en los mayores tendríamos que tener porcentajes superiores al 75%», señala, un nivel que se «rozó» durante el segundo año de la pandemia. «Por entonces la gente mayor tenía mucho más miedo», reconoce. Además, el doctor incide en que «los americanos abogan por coberturas del 90%», aunque reconoce que no las consiguen.

Preguntas y respuestas sobre la campaña de vacunación

¿Cuáles son las fechas clave de la campaña de vacunación?

El 1 de octubre comenzó la campaña para personas institucionalizadas, embarazadas y niños entre seis meses y ocho años. El día 14 de octubre comenzará la campaña de vacunación frente a la gripe y covid en todos los grupos de población en los que está recomendada: la población diana.

¿Quiénes forman estos grupos diana?

La lista es muy amplia, tanto dentro de la gripe como de la covid. En el primer caso están, por ejemplo, los mayores de 59 años, fumadores, personas que trabajan en servicios públicos esenciales, con especial énfasis en Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, bomberos y servicios de Protección Civil, los que tengan riesgo de complicaciones en caso de padecer la gripe, los que puedan contagiar, por proximidad a estas personas, personal de centros y establecimientos sanitarios y sociosanitarios públicos y privados, personal docente, personas con exposición laboral directa a animales o a sus secreciones en granjas o explotaciones avícolas, porcinas o a fauna silvestre y personas a partir de nueve años hasta 59 con determinadas condiciones de riesgo (diabetes, obesidad, enfermedad renal, enfermedades neuromusculares graves, etcétera). En el caso de la covid, personas de 70 o más años, internos en centros de discapacidad, residencias de mayores y residentes en instituciones cerradas, personal sanitario, convivientes con grupos de riesgo y personas a partir de 12 años pertenecientes a grupos de riesgo o con inmunosupresión grave, entre otros.

¿Dónde se administra la vacuna?

En el caso de las personas institucionalizadas en residencias, su vacunación se realizará por profesionales sanitarios de cada área de salud de Castilla y León, que acudirán a estas instituciones para administrar ambas vacunas. El personal sanitario y sociosanitario podrá recibir ambas vacunas en sus centros de trabajo, a través de los servicios de salud laboral de referencia. Para el resto de la población incluida en los grupos diana, se establecerán los lugares donde podrán vacunarse y el modo de citación en cada área de salud, de acuerdo con sus circunstancias sociales, poblacionales y sanitarias, entre otras.

¿Cómo se pide cita?

Podrá solicitarse desde unos días antes del 14 de octubre a través de los canales habituales: la app Sacyl Conecta, en su centro de salud, ya sea por teléfono o presencialmente y online, a través de www.saludcastillayleon.es.

¿Cuántos tipos de vacuna contra la gripe hay?

Cinco: 200.000 dosis de vacuna inactivada trivalente que se puede administrar a partir de los seis meses, 475.000 dosis de vacuna inactivada adyuvada para población general a partir de los 60 años no institucionalizada, 50.000 unidades inactivadas trivalentes con alta carga antigénica, destinada a población mayor de 60 años institucionalizada en residencias y grandes dependientes en sus domicilios, 650 vacunas inactivadas trivalentes, para personas alérgicas a antibióticos y 40.000 dosis de vacuna atenuada trivalente de administración intranasal cuya población diana son los niños y niñas entre 2 y 8 años inclusive.

¿Qué niños pueden vacunarse contra la bronquiolitis?

En el otoño se llevará a cabo de nuevo la campaña de inmunización frente al Virus Respiratorio Sincitial (VRS) con Nirsevimab, cuya infección produce lo que comúnmente conocemos como bronquiolitis. La inmunización se realizará mediante la administración de una sola dosis para todos los niños nacidos entre el 1 de abril de 2025 y el 31 de marzo de 2026. Los nacidos entre el 1 de octubre de 2025 y el 31 de marzo de 2026 recibirán el anticuerpo monoclonal en el hospital al nacimiento. Los nacidos entre los meses de abril y septiembre, se realizará una campaña de captación específica al principio de la temporada VRS, durante el mes de octubre, administrando la dosis en el centro de salud o de vacunación habitual.

¿Pueden los adultos ponerse esta vacuna?

Sí, los grupos de riesgo. Es una novedad de este año. El VRS tradicionalmente se ha asociado con bronquiolitis y neumonía en niños, pero también causa una importante morbilidad y mortalidad en la población adulta, especialmente en mayores de 65 años, personas con enfermedades pulmonares o cardíacas graves y en individuos inmunodeprimidos.