El Real Madrid, en el debut oficial de Sergio Scariolo en el banquillo blanco, ha ganado con muchísimo suspense (72-71) a un competitivo La Laguna Tenerife, en una segunda semifinal de la Supercopa ACB resuelta en los últimos segundos. Y es que el equipo merengue, que llegó a ir perdiendo por 14 puntos de diferencia, supo aguantar el tipo para acabar llevándose el gato al agua.

Así, los blancos jugarán este domingo su octava final de Supercopa ACB consecutiva, contra un Valencia Basket que en la primera semifinal se impuso (87-93) al anfitrión Unicaja en el Martín Carpena.

Los de Pedro Martínez han puesto la primera piedra para empezar con un título la segunda campaña con el técnico catalán al frente. El regreso del campeón de Liga en 2017 ilusionó y no se concretó en metales, pero el Valencia, con su nueva casa del Roig Arena, refuerzos y objetivos altos, volvió con buena mano.

Sin Jean Montero, Xabi López-Arostegui, Brancou Badio o Yankuba Sima, el equipo taronja supo rehacerse al fuerte inicio local, culminó una remontada de once puntos en el inicio del segundo cuarto (29-18) y dominó tras el descanso. Una de esas caras nuevas Omari Moore, con 20 puntos y 26 de valoración, lideró al Valencia, que no echó de menos a su base estrella Montero e insistió con su filosofía ofensiva hasta que entraron más triples que al rival.