ALICANTE. El Atticgo Elche afronta este domingo (19:00 horas) el partido de vuelta de la segunda ronda de la EHF Copa Europa en la pista del Dunajska Streda de Eslovaquia con optimismo pero sin confianzas a pesar de los 10 goles de margen que logró en el encuentro de ida, disputado la pasada semana.

La eliminatoria entre estos dos equipos, acostumbrados a llegar lejos en la competición, se intuía mucho más equilibrada, si bien para el entrenador del Atticgo Elche, Joaquín Rocamora, el resultado tuvo más que ver con un “extraordinario” rendimiento de su equipo que con un mal partido del rival.

Rocamora advirtió durante la semana que será clave afrontar el encuentro sin mirar el marcador y, sobre todo, impedir que el equipo eslovaco pueda tener la más mínima opción de soñar con la remontada.

El técnico espera un rival “duro, agresivo y que va a intentar correr mucho para disponer de más posesiones”, si bien precisó que su equipo está preparado y mentalizado para contrarrestar los ajustes tácticos del rival.

El equipo ilicitano, campeón de este torneo hace dos años, recupera a Paola Bernabé, clave para Rocamora, que la definió como una “líder natural” y capaz de sumar “en todos los aspectos del juego”.