La tenista francesa Océane Dodin, de 29 años, regresó esta semana a la competición tras casi un año alejada de las pistas de tenis. Un afección en el oído y problemas de vértigo la dejaron fuera de juego desde que disputara en diciembre de 2024 el WTA 125 de Limoges. En este tiempo de baja, ha pasado por el quirófano. No lo oculta. Se ha sometido a una operación de aumento de pecho.
«Si voy a parar seis meses, mejor hago lo que quiero. Y prefiero hacerlo ahora que a los 40, cuando habré terminado mi carrera. Estoy muy contenta de haberlo hecho, no me arrepiento para nada y no me molesta. Todo el mundo me decía: «No vas a poder jugar». Como si me hubiera puesto sandías», comenta, entre risas, en una entrevista con RCM Sports.
Debo ser la primera tenista que va a jugar tras un aumento de pecho. Todo el mundo me decía: «No vas a poder jugar».. como si me hubiera puesto sandías
Océane Dodin
Océane Dodin, tras la operación de aumento de pecho.Instagram: @oceane_dodin
Dodin, que llegó a ser la 47 del mundo y pisas los octavos de final del Open de Australia en 2024, reconoce que los problemas de oído le acompañan desde hace 10 años. Sin que los médicos le den una solución. «No se ha resuelto, pero estoy un poco mejor. Me mareo y la cabeza me da vuelta. Al aire libre y con sol, veo tres pelotas, es muy complicado Donde más cómoda me siento es en pistas indoor», afirma en su vuelta en el ITF de Reims (se retiró en cuartos de final cuando iba 6-1 y 3-0 abajo ante su compatriota Manon Leonard).
¿Simona Halep? Eran muy, muy grandes. Eso la limitó
Océane Dodin
Mientras Simona Halep se operó los pechos en su día para reducir su tamaño para «poder moverse mejor por la pista», Dodin insiste que a ella el mayor tamaño de sus senos no le empeoran el rendimiento raqueta en mano: «No son pequeños, pero eso no me molesta cuando juego. Hay sujetadores adaptados. En cuanto a Simona Halep, eran muy, muy grandes. Eso la limitó. Pero sí, es cierto que debo ser la primera tenista que va a jugar tras un aumento de pecho; tiene que haber una primera vez para todo».
Dodin se puso en manos de un amigo cirujano. «Me dijo dónde ponerme las prótesis para que no me molestaran, cómo usar un sujetador para sujetarlas. Todo estaba planeado. Me dijo que no me molestaría. Si me hubiera dicho lo contrario, no lo habría hecho», comenta Dodin.