En Operación Triunfo los concursantes, en teoría, aman la música. Muchos esperan al entrar en la conocida academia labrarse una extensa y exitosa carrera en la que se graben discos, se hagan giras, y lluevan los premios y los reconocimientos. Sin embargo, casi 25 años después del estreno de la primera edición, sabemos que eso sucede en casos muy contados.

Este lunes, OT celebra su segunda gala, la primera en la que habrá expulsión. Y uno de los que está en la cuerda floja es Iván Rojo, un joven que ya ha calado entre el público, y no para bien precisamente. Su comportamiento no está gustando a Noemí Galera, directora de la academia, que no le ve aprovechar las enseñanzas.

“Si se va el lunes, se dará cuenta de que ha desaprovechado una oportunidad estupenda”, afirmó Galera en Conexión OT, lamentando que tenga la cabeza más fuera de la academia que dentro. Tanto es así que él ya se ve un ídolo en su ciudad natal. Lo tengo clarísimo. Tiene que estar Valladolid revuelta, voy a llegar y va a ser eso superguay”, ha llegado a afirmar el joven.

Pedro Ruiz y Risto Mejide en 'Todo es mentira'.

Iván, y quién sabe si algunos compañeros más, necesita poner los pies en el suelo, y saber que está solo en la línea de salida de una carrera musical. Y si la tiene, y no se ve obligado a abandonarla, como tantos y tantos compañeros de ediciones anteriores, que tras diversos esfuerzos no pudieron recoger frutos.

En el año 2018, Noemí Galera vio esa falta de compromiso que ahora siente en Iván en los concursantes que entonces habitaban la academia. Chicos que, como él, tenían la cabeza fuera, y pensaban en la gira que darían al salir, cuando todo acabase. Y entonces, la directora dio una lección magistral que sería casi de visionado obligatorio de edición en edición.

Noemí Galera – Bronca OT

Galera entonces le dijo a los chicos que el concurso les garantiza grabar un disco a la semana, pero que una vez salgan, a ver quién consigue grabar otro. “Porque a lo mejor salís y no os conoce nadie, ni siquiera a los que estén aquí tres meses”, advirtió.

Les recordó que el público ve cómo se comportan, incluido los productores musicales, y que quizá un productor, al percibir falta de compromiso, deciden no grabar un álbum con cualquiera de ellos. Que puede haber firmas de discos, pero que igual nadie acude a ellas.

Noemí Galera Manu Guix en 'OT 2025'.

“Y si hay 2.000 personas, nos quieren mucho, pero cuando salgamos quizá hay cien. La tele tiene algo bueno: llegas a la casa de la gente muy rápido y nos conoce todo el mundo. Pero también tiene algo malo: cuando se pagan estos focos, en 15 días nadie sabe quién eres”, sentenciaba Galera.

“A compañeros vuestros ya no los están viendo. Aprovechadlo. Nadie os asegura que haya una gira. ¡Qué gira!”, recriminó, valorando que los participantes de la edición anterior tuvieron suerte, pero que ellos, igual, no podrían llenar un Bernabéu. Unas palabras que fueron proféticas, pues varios conciertos fueron cancelados de la gira de Famous y compañía, incluido el último previsto.

El tiempo ha demostrado la gran verdad que escondía esa lección de Noemí. Dave Zulueta o Carlos Right, de esa edición 2018, ya han abandonado su carrera en la música. El tiempo ha demostrado que ni siquiera ganar el talent show es una garantía para hacer giras y sacar discos (o singles), y la prueba la tenemos en Naiara, ganadora del último OT, y que solo ha lanzado varios sencillos sin mucha repercusión.

Si echamos la vista atrás, podemos recordar cómo incluso artistas que pasaron por Operación Triunfo y fueron a Eurovisión (y quedaron bien) como Ramón del Castillo acabaron por tirar la toalla en una industria muy competitiva. Y eso que su Para llenarme de ti se bailó en aquel verano de 2004.

Iván Rojo y Claudia Arenas, los dos primeros nominados de Operación Triunfo 2025

Iván Rojo y Claudia Arenas, los dos primeros nominados de Operación Triunfo 2025

Fotografía: Operación Triunfo 2025.

El detalle de creerse ya una celebridad local no ha sido el único patinazo que Iván ha cometido estos días en el concurso. También ha criticado el uso de lenguas cooficiales en España. Sus compañeros Max y Tino, catalán y gallego respectivamente, defendieron que se hablase mallorquín, que es considerado una variante del catalán, «al mismo nivel que el castellano». Pero para Iván es una lengua cooficial, no es una lengua oficial.

Una charla que ha generado mucha controversia en los espectadores. Iván demuestra sí no conocer la historia del programa, si no, quizá recordaría las críticas que despertó Eli en OT 2020 cuando aseguró que el vasco era “feo”, la misma semana que estaba nominada. Salió expulsada con el mayor porcentaje de la historia del formato, como curiosidad.

Por todo esto, Operación Triunfo quizá debería incluir en sus clases una sección hemeroteca, donde se recojan todas las lecciones importantes que han ido compartiendo con los alumnos de la academia, tanto docentes y directores como invitados.

Y es que, desde su primera temporada, muchos han sido los cantantes (más o menos) consagrados que pasaron por la academia para pasar un rato con los chicos y, de paso, regalarle algunos consejos. Algunos que causan revuelo, como aquello que dijo Christian Castro sobre prácticas que pueden hacerte bajar varios tonos si las llevas a cabo antes de subirte a un concierto. Y otras que valen su peso en oro.

En ese sentido, destaca Mónica Naranjo cuando charló con los concursantes del primer año. Entonces recomendó a los triunfitos que se alejasen de la prensa rosa, y que habían entrado en una jungla en la que solo aguantarían los más fuertes. Sus palabras eran tan duras que llegó a pedir perdón por pintar todo “tan sumamente oscuro, pero es que si os lo pintara más bonito os mentiría”.

Y lo más jugoso fue cuando habló de lo que pasaría fuera de la academia: “En el momento que salgáis de aquí, todos vais a tener oportunidades de todo tipo, todos, algunas muy jugosas. Os recomiendo un buen abogado antes que un mánager, pero un abogado siempre especializado en lo que son temas artísticos, que los hay”.