La actriz Dolores Fonzi dirige su segunda película, un drama judicial sobre la lucha por la despenalización del aborto en Argentina.

Por Laura Pérez
Para Fotogramas

HACÉ CLICK AQUÍ PARA UNIRTE AL CANAL DE WHATSAPP DE DIARIO PANORAMA Y ESTAR SIEMPRE INFORMADO

En el mismo Festival de San Sebastián donde se ha estrenado ‘Belén’ se presentó en 2019 el documental ‘La ola verde (Que sea ley)’ (Juan Diego Solanas) que mostraba la lucha feminista por conseguir en Argentina una ley que despenalizara el aborto (se logró en 2021). ‘Belén’, presentada en Sección Oficial a concurso, está directamente emparentada con esa película porque ficciona uno de los casos que desató esa marea de protestas masivas en las calles. Se trata del de Belén, nombre ficticio de una chica de 24 años que acudió a las urgencias de un hospital público en Tucumán y despertó en el quirófano esposada y rodeada de policías. Pasó más de dos años en prisión acusada de haberse practicado un aborto en el baño (magnífico el fuera de campo que ofrece aquí la directora). Tras un juicio lleno de irregularidades y mentiras fue sentenciada a ocho años de cárcel.

La actriz Dolores Fonzi (47), quien debutó tras la cámara con la divertidísima y tierna ‘Bondi’ (2023), coescribe y dirige este drama judicial vertebrado por la lucha de la abogada Soledad Deza para reabrir el caso y hacer justicia. Ella misma interpreta a la protagonista, que no es la víctima sino la letrada, transitando todo el proceso de forma poderosa y enérgica. Se enfrenta a la propia Belén que desconfía de ella, a la ineficaz abogada que la (in)defendió antes que ella, al juez, a los funcionarios, a la opinión pública, al sistema. Siguiendo los patrones del género de forma bien medida y controlada, eleva la intensidad hasta el momento de su alegato final regalándole, sin embargo, la escena de la sentencia a la víctima, interpretada por Camila Plaate, y no a ella.

A lo largo de la película Fonzi deja de manifiesto la excelente mano que tiene para manejar la comedia, como demostró en su película debut. Aquí reserva algunos fantásticos gags que lleva casi siempre el personaje de su socia, interpretado por Laura Paredes, quien es también coguionista con ella.

Belén’ termina, precisamente, con imágenes reales de la marea verde (es el color del pañuelo adoptado como símbolo) a la que nos referíamos al principio, y de la propia abogada. Si bien no eran necesarias para la narración, perfectamente concluida, aportan trascendencia a la película y suman un contexto valioso especialmente para el público internacional.

Para ver un drama judicial feminista y constatar que la actriz Dolores Fonzi es una excelente directora.