
Tras deslumbrar el pasado fin de semana en el desfile de Giorgio Armani celebrado en el marco de la Semana de la Moda de Milán, Richard Gere (76) y Alejandra Silva (42) participaron este lunes en la gala por el X aniversario de la ONG Open Arms. El matrimonio comparte su interés por la labor humanitaria, algo que la empresaria percibe como un punto a favor en su relación, que abarca más de una década. Se conocieron en Italia, en el año 2014, y se dieron el ‘sí, quiero’ en 2018. Padres de dos hijos, residen en Madrid desde el otoño de 2024.
Durante el evento, que tuvo lugar en la Llotja del Mar de Barcelona, Alejandra celebró el hecho de compartir inquietudes con su marido. «Más que nuestro amor flechado a primera vista, luego fue nuestras causas humanitarias y donde está nuestro corazón. La causa del sinhogarismo era mi causa y el la adoptó. Por eso nos llevamos tan bien y por eso estamos juntos a día de hoy, nos enriquece mucho», comentó, aprovechando para desmentir las informaciones referentes a la supuesta compra de una casa en Galicia: «¿Qué Casa de Galicia? Por favor contactadme, os voy a dar mi email y yo estaría encantada. Porque Galicia también está en mi corazón, soy gallega, y al final sí que me quiero retirar en Galicia, en Galicia como en ningún sitio, vamos».
Por su parte, el actor de Pretty Woman reivindicó su compromiso la ONG, con la que colabora hace años -en 2019 se subió a uno de sus barcos para llevar alimentos a alta mar a 121 inmigrantes rescatados de un naufragio en el Mediterráneo-, y aprovechó para relatar una anécdota de sus inicios con Alejandra: «La llevé a Lampedusa, y sentí una gran responsabilidad por lo que estaba pasando en el Mediterráneo. Así que visitamos el campamento allí y vimos gente de toda África, pero también del Middle East. Y luego, años después, Ale me contó de esta increíble experiencia del grupo, Open Arms, y Oscar Camps».

Con la sinceridad que siempre le ha caracterizado, el artista también mandó su apoyo incondicional a la población palestina y mandó un mensaje al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. «Tiene que irse. Tiene que irse. Esto no es algo que pueda cambiar. Tiene que irse. Y todos los encargados y la coalición que tiene, todos tienen que irse», expresó, compartiendo también su rechazo al presidente de su país natal, Estados Unidos. «Tenemos a un presidente que es completamente… no solo es loco, es una presencia oscura. Y ha pasado tan rápido, en seis meses casi ha destruido nuestro país», afirmó sobre Donald Trump.
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