Carlos Alcaraz sigue incrementando el ritmo para preparar la gira de pista dura por Estados Unidos, que primero le llevará a Cincinnati y después … a Nueva York. Ayer se ejercitó en las pistas del Club de Campo de El Palmar, tras unos días de trabajo en La Manga Club, y volvió a darse un baño de masas en su casa. Carlitos viajará el próximo lunes a Cincinnati junto a Samuel López y parte de su equipo. Después encarará el US Open (24 de agosto al 7 de septiembre), con opciones de acercarse en el ranking al número uno y vigente campeón del Grand Slam neoyorquino, un Sinner con el que tiene cuentas pendientes después de perder contra él en la final de Wimbledon.
«Me parece fantástico para el tenis que estemos construyendo una rivalidad tan bonita, creo que va a hacer que cada vez más personas se interesen por nuestro deporte», declaró Alcaraz recientemente en una entrevista concedida al diario italiano ‘Gazzetta dello Sport’. «Cada vez que nos enfrentamos, nos llevamos más allá de nuestros límites el uno al otro. Para mí, lo mejor del tenis es el respeto mutuo que promueve entre rivales. Sinner y yo somos buenos amigos, podemos hablar de muchas cosas fuera de la pista, estoy convencido de que siempre mantendremos nuestra relación en estos términos. Es una gran persona», añadió el tenista murciano.
Fortaleza mental
En la citada entrevista, el número 2 del mundo se refirió también a su mejoría a nivel mental a lo largo de este 2025. «En el tenis, todo se basa en la mentalidad. Cuando estoy en pista, intento no pensar en nada más que en jugar a un deporte con el que me divierto. Siempre fue mi sueño ser tenista. Creo que así es más fácil lidiar con la presión, simplemente, me centro en el juego. Hubo un tiempo en que me influyeron bastante las críticas, pero ahora he aprendido a no darle demasiada importancia a eso. He aprendido que de las derrotas se aprende, que cada paso cuenta. Lo importante es ser constante y esforzarte por mejorar. El trabajo que he hecho a nivel psicológico me está ayudando mucho», confesó Carlitos.
«A veces, es inevitable que surjan pensamientos negativos, pero mi psicóloga me ayuda mucho a gestionarlo. Trabajo con ella desde hace cinco años y he notado muchísimo la diferencia. Desde que me da consejos sobre cómo lidiar con el estrés durante los partidos, mi mentalidad ha mejorado notablemente», argumentó un Alcaraz que espera que el tramo final de 2025 sea completamente diferente al de 2024. «El año pasado me pesó mucho lo sucedido en los Juegos Olímpicos», reconoció Alcaraz.