Se levantó Adriana Mallo sobre el pasivo. Era la última opción en el ataque final del Conservas Orbe Porriño. Se elevó desde nueve metros porque no había más jugada, ni opción, ni fuerza, ni alternativa. Ahí, en el último esfuerzo, en la gota de sudor que quedaba al equipo de Isma Martínez, la viguesa sacó el brazo y hundió el balón en el fondo de la portería del Elda para sumar la cuarta victoria de la temporada y, probablemente, la más complicada porque el equipo louriñes se presentó ayer escuálido en el Municipal. Jugó con lo que tuvo porque no había más y ganó, aunque estuvo muy cerca de no hacerlo porque los diez últimos minutos resultaron una agonía física, un transitar en la maratón con calambres, el cubrir el camino de Santiago por Teo con ampollas en los pies. Los cuerpos no daban más.
Se presumía un enfrentamiento duro y cerrado a pocos goles ante el Elda Prestigio dirigido por el extécnico del Guardés José Ignacio Prades, un entrenador de reconocido prestigio por la calidad defensiva de sus conjuntos. No sucedió ayer así porque, para encajar poco, es preciso tener buenas cancerberas y ayer las tuvo de papel. La eficacia visitante estuvo por debajo del 20% y así es complicado ganar. También es cierto que buena parte del mérito estuvo en el trabajo del Porriño.
Paulina Buforn y Adriana Mallo ocuparon los laterales y Caro Bono entraba en la zona de central para dirigir el ataque y cambiar con la pivote. No había ninguna primera línea más, salvo la juvenil Iria Augusto, de presencia testimonial en defensa para dar algo de aire a una Mallo que, además, tenía que defender en el penúltimo. Así, con ese planteamiento, el cuadro louriñés tenía que intentar ganar el partido y lo hizo, pese a empezar por detrás en el marcador. Igualó pronto y se subió a lomos de Ferrarín para obtener las primeras ventajas. Defensa fuerte y eficacia de la cancerbera para abrir las primeras distancias de dos y tres goles, mientras que en ataque Paulina Buforn comenzaba a sacar a pasear la potencia de su brazo, además de forzar todo el equipo, con papel especial para Zhukova, una buena cantidad de lanzamientos de siete metros que la ibicenca enviaba a la red. Terminó con nueve dianas en otros tantos intentos en esta faceta. Clave. Al descanso se llevó con un lanzamiento desde su propio campo al palo de Carmen Prelchi y renta de tres goles para el Porriño.

Paulina Buforn destacó ayer al anotar 13 goles, nueve de ellos de lanzamientos de 7 metros sin error.
La reanudación mantuvo la constante. El Elda tenía problemas en las circulaciones que prolongaba una y otra vez bajo la dirección de la exporrriñesa Malena Valles. Otra ex como Maddi Bengoetxea era la única que acompañaba a la central en la primera línea, pero el encuentro marchaba a favor local. Rentas de dos, tres y hasta cuatro goles cuando Prades ordenó la defensa individual sobre Paulina Buforn. Isma respondió con doble pivote y se vio una de las acciones tácticas más bellas de la tarde con paso cruzado por el balcón del área al pivote más alejado de la ibicenca a Prelchi. Terminó con siete metros y gol.
Así se entró en el tramo final con un 26-22 (min. 52) que parecía decantar el encuentro. Pero era apariencia porque se comenzaba a observar que el equipo local estaba sin físico. No quedaba energía tras jugar todo o casi todo el encuentro Adriana Mallo, Paulina Buforn y Zhukova. Bono, con sus descansos en defensa, llegó al duelo sin entrenar en la última semana por un golpe. El Elda exprimió la situación. El cansancio provocó varias pérdidas y faltas de ideas del Porriño en ataque y el Elda pudo atacar mejor, en varias ocasiones con portería vacía y dos pivotes, para terminar por el extremo en el que Paula Lluch anotó tres dianas seguidas para hacer el 26-26 (min. 58). Eran momentos en los que a Ferrarin también se le terminó la magia.
Isma Martínez paró el partido para ordenar la jugada o dar aire a sus jugadoras. Ambas cosas eran precisas. Bono anotó en penetración y Bengoetxea igualó. Y llegó el ataque definitivo. La elaboración fue atascada, sin encontrar ventajas, con varios golpes francos y, en la última opción, se elevó Adriana Mallo y, sobre el último aliento tras un encuentro de esfuerzo máximo, envió el balón al fondo de la red. No quedaba más. Parón necesario y será parón feliz para el Porriño.
Porriño 28 – Elda 27
Conservas Orbe Zendal Porriño:
Ferrarín (p.), Blanco (p.s.), Adriana Mallo (5), Ekaterina Zhukova (3), Caro Bono (3), Campo, Benaches, Iria Augusto, Julia Figueira (1), Adriana Rial (1), Isis Moreno, Paulina Buforn (13), Prelchi (1), Ugazi, Laguna (1).
Elda Prestigio:
Lucía García , Sol Azcune, Agda Gonçalves, Luna Villaescusa, Malena Valles, Emiliana Heilmann, Julia Terrado, Elena Cuadrado, María Rodríguez, Maddi Bengoetxea, Claudia Martinez, Paula Lluch, Marina González, Aitana Pastor, Meriem Ezbida y Virginia Robles
Parciales:
1-2, 4-5, 7-6, 10-8, 13-11, 15-12(desc), 17-14, 20-19, 22-20, 25-22, 26-23, 28-27.
Árbitros:
La pareja arbitral estaba formada por Abel Juncal López y Angel Mateos Alonso Ruiz Roja a Torrado (min. 48). Excluyeron a Iria Augusto; Emiliana Heilmann, Elena Cuadrado, Maddi Bengoetxea y Claudia Martinez.