En las últimas semanas, los contagios de Covid-19 se han incrementado en España de forma paulatina, tal y como muestran los últimos datos publicados por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), que depende de los ministerios de Sanidad y de Ciencia. Así, ya durante el verano se ha visto cómo la incidencia ha pasado de los 46,6 casos por cada 100.000 habitantes a mediados de junio, hasta los 99,3 casos/100.000 habitantes en la semana del 15 al 21 de septiembre. El último informe, que recaba datos hasta el pasado 5 de octubre, apunta a una incidencia de Covid de 63,8 casos por cada 100.000 habitantes. A pesar de este leve descenso en la última semana, los expertos apuntan a una serie de factores que han hecho que esta enfermedad se encuentre ya instalada de forma «casi endémica» entre la población.
El inmunólogo Rafael Toledo, catedrático de parasitología de la Universidad de Valencia, ha detallado en una entrevista en 65ymás el porqué de estas «pequeñas alteraciones» que han elevado los casos en las últimas semanas.
El hecho de que no hubiese habido un «pico» de Covid previo ha evitado que la mayor parte de la población renovara su inmunidad, por lo que resulta más fácil contagiarse al exponerse al coronavirus. Además, este aumento de la incidencia detectado durante septiembre coincide con «la vuelta a los colegios» y el fin de las vacaciones para muchos, de modo que se produce una mayor interacción en espacios cerrados, como el transporte público o las oficinas.
Asimismo, Toledo señala que «todavía no se ha impuesto la gripe», que por ahora presenta una baja incidencia —20,3 casos/100.000 habitantes en el último informe—.
Este aumento en la incidencia del Covid no se ha trasladado, en cambio, a las hospitalizaciones. Los últimos informes del Instituto de Salud Carlos III detallan 1,5 casos por cada 100.000 habitantes. En términos de gravedad, apunta el informe más reciente, los casos hospitalizados por Covid-19 presentan un 29,4% de neumonía, un 7,7% de admisión en UCI y un 9,1% de letalidad.
Aquí han jugado un papel crucial las nuevas variantes detectadas, como la Stratus y la Nimbus, que aunque «aumentan la transmisibilidad», no reportan casos más graves, indica Manuel Muro, jefe de Inmunología del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca. «No hay ningún motivo de alarma ni de preocupación en absoluto frente a ellas. Seguirán surgiendo en el futuro, según su evolución», ha asegurado Muro.
Los síntomas de estas dos cepas que ya vigila la Organización Mundial de la Salud (OMS) son similares a los de variantes anteriores, como la Ómicron. Así, a la fiebre, el dolor de cabeza y el malestar general habría que añadir también el dolor agudo de garganta e incluso ronquera en la voz.
Ante esta escalada que ya se está detectando, expertos como Daniel López Acuña, exdirector de acción sanitaria en situaciones de crisis de la OMS, insiste en la vacunación como la mejor forma de prevenir y atajar los contagios, no solo de Covid, sino también de gripe y otros virus.
El foco de la inmunización debe estar en las personas mayores y aquellas que pertenecen a grupos de riesgo, como aquellas que tengan enfermedades crónicas. «Si queremos evitar o mitigar una tripledemia este otoño-invierno, hay que vacunar ya«, avisa este experto de la OMS.
A ello hay que sumar el «uso de mascarillas en espacios de riesgo como hospitales, centros de salud y residencias», y si se tiene una infección activa, es imprescindible utilizarla también en «grandes aglomeraciones, espacios cerrados y transporte público», concluye.