La afición de Madrid también obligó a saludar a Frascuelo. El tercero también fue de Garcigrande. Otro novillo fino, cornidelantero. Frascuelo -que entró por sustitución de Julio Aparicio– lo saludó con delantales que remató con dos medias engarzadas con su torería añeja. Brindó a la Infanta Elena. En la muleta resultó un novillo que requirió venir muy enganchado. Frascuelo dejó perlas de su sabor en una actuación de mucha disposición. Pinchazo y estocada. Vuelta al ruedo.